Graffitis: «El colmo de la paciencia»

Fernando Guardiola
Colaborador de El Periódico

Si la indignación y la impotencia que siento en estos momentos, al escribir este artículo, tuviese algún parámetro con que medirlo, sobrepasaría con creces cualquier nivel que estuviera dentro de la normalidad.
Que Torrevieja es una ciudad sucia no es nada nuevo. Que en sus calles es más difícil andar sin pisar una «catalina» de perro que que baje el Euríbor, también… Que a las 11 de la mañana los contenedores ya estén preparados para ser recogidos de nuevo, también… y de todo eso tenemos la culpa nosotros mismos. ¡Sí, no me mire así! Usted, yo, y la vecina del 3º… Somos unos irresponsables… aunque poco a poco las cosas parece que van mejorando. Pero de que últimamente cada trozo de pared, cada persiana, cada cristalera, cada obra esté llena de graffitis, eso, aparte de ser una vergüenza, es obra sólo de unos cuantos vándalos que no saben el valor que tiene, primero estético y después económico, la bromita nocturna que a ellos les «orgasmiza».
Propongo que en la próxima guía que Turismo edite, se incluya, la «Ruta del graffiti»: Propondría un buen arranque, para abrir boca, con la fachada de toda la urbanización Parque de las Naciones (donde está situado el Registro de la Propiedad). Éste y las calles adyacentes son la «zona cero» del graffiti y la suciedad en las calles. Vamos, que el Bronx neoyorquino es una pastilla de clorato junto a esto.
Pero vayamos a lo que me ocupa en este artículo: Los graffitis. Parece como si, cuanto más nueva y reciente fuese la fachada destino de la misma, más saña y satisfacción le proporcionara al gamberro que la ejecuta, y, como ejemplo, la fachada de la aún no inaugurada oficina de Correos de la calle Caballero de Rodas, o las persianas de la tienda de Vodafone en la calle Orihuela…
Torrevieja, la misma ciudad que dentro de unos años puede presumir de tener una fachada marítima digna del mismísimo Principado de Mónaco, no se puede permitir que cuatro gatos, pues no hay que ser grafólogo para ver que son los mismos los que hacen las pintadas, campen a sus anchas por la noche torrevejense.
Pido al responsable de Policía, ahora que contamos con 180 agentes, que por varias noches se dediquen varias patrullas, a pie y de paisano (no me los vaya a mandar de uniforme y con coche patrulla… que me los espanta), a patearse el pueblo y dar con los «artistas»… y después, con luz y taquígrafos, se diga su identidad y se les imponga un castigo ejemplar que aleje en otros la idea de volver a hacerlo, a ser posible que, como sanción, limpien la «decoración» insultante que afea las calles de Torrevieja.

3 comentarios

  1. parece mentira que nadie reconozca el mérito que tienen esos artistas callejeros,pero hacen unas obras en cualquier lugar,que parecen dar vida al entorno.Por mi parte,yo os felicito,chavales y os digo que sois maravillosos.Lástima que yo no tenga una gran pared para ofrecérosla.¡Felicidades,artistas!

  2. jajaja nunca nos vas a parar ni con 100 agente de policia sinceramente puede q nos pilles a algunos pero nunca pararemos esto no se puede parar i te as currao el reportaje pero no servira de nada i las firmas esas las conocco son colegas mios jaja i esos lleban tntos años pintando q no puedene con ellos ni 50 policias bueno salu2

  3. Me acaban de pintar en la fachada, de mi casa, «propiedad privada» señores( por no definirles de otra forma), como veo que ustedes no nos respetan, tampoco creo que nosotros debamos respetarlos así que les dedico lo siguiente:

    Para Kartaojal:
    me parece muy irresponsable tu ánimo lanzado a estos indeseables. Si quieren pintar, que lo hagan con respeto hacia el bien ajeno.

    Para Grafiter ( Graffither ) parece que tu definición de Grafitero si que lo sabes escribir en el idioma correcto, pero más te valdría aprender un poco de ortografía y ya no digo estudiar para hacerte un hombre, porque para mi eres un «sopla p**»

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