Renovarse o morir. Reinventarse constantemente no es un capricho, es ya una obligación, aunque sólo sea por no descolgarnos del ritmo vertiginoso de los avances de la sociedad. Así, nos encontramos ante unas Fiestas Patronales totalmente renovadas, conservando sus actos más tradicionales, y añadiendo otras actividades novedosas, enfocadas especialmente a la juventud, como el concurso «La Gymkhanica», el «conciertico» de las paellas o el concurso de «selfies», así como actividades de animación comercial para todos los públicos bajo el lema «Caballero de Rodas, km. 0», o un peculiar encierro de sanfermines con toros hinchables, siguiendo la estela del éxito cosechado en la pedanía de La Mata. Una apuesta que en pocos días podremos disfrutar, y que forma parte de esa «transformación para el futuro» de Torrevieja por la que apostaba hace pocas fechas el arquitecto Federico Lizón, en una charla organizada por Rotary Club en el inicio de las Fiestas del Casino. Lamentablemente, muchas veces, reinventarnos es la única opción que nos queda, como a las víctimas del terrorismo y las guerras que, por desgracia, siguen siendo actualidad. Pero incluso nos obligan a ello circunstancias más cotidianas como una enfermedad, la marcha de un allegado, un contratiempo informático que hace perder el trabajo de muchos años, un motor que se incendia o un desplome del techo como el sufrido en el retén de la Policía Local, que hacen que se rompa en un momento nuestra habitual comodidad, tan pocas veces valorada. Por eso, no perdamos la oportunidad de disfrutar de todas las fiestas y actividades que tenemos estos días en Torrevieja: ruta de la tapa, fiestas de Santa Cecilia, «Black Friday»… y, cómo no, las nuevas Fiestas Patronales.
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