» El alcalde desvela que la Casa de la Tercera Edad de San Pascual cuenta con hasta 40 deficiencias de seguridad
Por mayoría absoluta se acordó en el Pleno ordinario de julio dar carpetazo de forma definitiva al plan urbanístico que pretendía reclasificar 300.000 m2 de suelo agrícola para su uso industrial, ubicado junto al Parque Natural y en la misma zona que albergó una planta de transferencia ilegal que se clausuró. La concejal de Urbanismo, Fanny Serrano, señaló que este expediente, que data de febrero de 2007, «nunca debería haberse iniciado ni tramitado». Para la edil, «solo ha hecho perder el tiempo en algo que nunca iba a llegar a buen puerto». Los promotores del plan pretendían realizar actividades tales como de tratamiento de residuos, pero desistieron a la tramitación del plan después de 8 años de procedimiento en el que no conseguían una aprobación definitiva por parte de la Generalitat. El plan, que fue aprobado de forma provisional ese mismo año en el Pleno, se ha archivado ahora por el mismo órgano colegiado. Serrano subrayó que las empresas han renunciado a cualquier indemnización por responsabilidad patrimonial y solo piden la devolución de los avales por importe de unos 300.000 euros. El concejal portavoz del PP, Eduardo Dolón, pidió que se deje de mirar al pasado y respaldó la resolución del expediente que su partido inició en 2007. El alcalde, José Manuel Dolón, manifestó que «estamos cancelando una página negra de la historia de Torrevieja».
Decretos
El PP cuestionó el acuerdo de la Junta de Gobierno de prorrogar el servicio de recogida de basuras hasta que se ponga en marcha la municipalización. El PP aseguró que la prórroga tácita en los contratos «debe considerarse nula» y consideró «inexplicable» que el alcalde levantara el reparo -que contaba con una nota de reparo con efectos suspensivos- en base a los informes técnicos que eran contrarios. «O usted no sabe leer o no sabe lo que firma», apostilló. La oposición también cuestionó la gestión del contrato del servicio de salvamento y socorrismo. El alcalde argumentó que los técnicos indicaron que se debía sacar a concurso y que es un contrato «más barato» y para 6 años, señalando que no habrá más problemas en un futuro por este motivo.
Casa de San Pascual
La clausura de la Casa de la Tercera Edad de la calle San Pascual fue nuevamente cuestionada por la oposición. El alcalde desveló que se le ha requerido el certificado de final de obra al arquitecto director de la obra, sin embargo, éste contestó en un informe el pasado 13 de julio que «ha sido imposible», ya que, según indicó, la obra «no está disponible para destinarla al fin para el que se construyó». Además, enumeró hasta 40 deficiencias que subsanar en seguridad. «La legalidad tiene que estar por encima de todo», afirmó el alcalde, señalando que por ese motivo no se han iniciado las obras y que se está tratando de resolver este tema.
Ruegos y preguntas
El incumplimiento de la normativa de vallado y de riesgos laborales de las obras de ampliación del Ayuntamiento fue uno de los asuntos por los que preguntó el PP, que además exhibió fotografías de las vallas y de algunos albañiles trabajando «en bañador». «Llega tarde». Así se expresó la edil Fanny Serrano, quien explicó que el Ayuntamiento sancionó a la empresa en mayo con 800 euros y lo ha vuelto a hacer esta misma semana por el vallado. Además, aseguró desconocer que los albañiles hayan trabajado en bañador y reprochó al PP que no lo comunicara al Ayuntamiento o al servicio de inspección laboral. Otros de los aspectos por los que se interesó la oposición fue el retraso en la instalación de dos semáforos en la entrada y salida del puerto. El alcalde aseguró que a primeros de agosto se instalarán dos semáforos móviles de forma provisional y que las obras se acometerán este año dentro del nuevo presupuesto. C’s preguntó por la limitación a menores en las filas de protocolo en el Certamen de Habaneras; hecho que el concejal del área, Domingo Soler, tildó de ser una pregunta propia «del 28 de diciembre».
Polémica
El pleno no estuvo exento de polémica. El alcalde apercibió al público, que durante la sesión se pronunció en voz alta pese a que el ROM no lo permite, y ordenó a una pareja de policías locales que se quedara a las puertas del salón de Plenos, y desalojara a aquellos ciudadanos que intervinieran. También se produjo un rifi-rafe entre el concejal del PP Luisma Pizana y el alcalde, ya que éste primero llamó «payaso» al alcalde, quien también le contestó con el mismo calificativo. Aunque en un primer momento le pidió que abandonara la sala -y los policías hicieron el amago de acercarse a él para acompañarle-, finalmente solo le llamó al orden.
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