Su simpatía igualaba a su inteligencia

El doctor Iglesias Puga, que nos dejó el 19/12/2005, era un hombre simpático, sencillo y humilde, a pesar de su inmensa fortuna, la fama de su hijo Julio, casado con Isabel Preysler y su profesión de ginecólogo e inventor de la epidural. Tuvo una vida muy activa a nivel amoroso; el primero fue Charo de la Cueva, 4 años menor que él, con la que se casó. Al conocerla, y tras el «flechazo», dijo: «¡A ésta me la como yo con patatas fritas, pero no me hizo ni caso!». Fue lo que dejó plasmado en sus memorias, «Voluntad de hierro». Su vida azarosa transcurrió entre la Guerra Civil, sus estudios, trabajo, instituciones creadas por él, como la maternidad de la calle O’Donnell, con capacidad para 500 camas. Al año de estar casados, el 23/9/1943, les nació su primer hijo, Julito, y en el 45 su otro hijo, Carlos. Un duro golpe fue el accidente que tuvo Julio en 1962, y el doctor, como padre y médico, logró que se recuperara de sus lesiones medulares, que restaban movilidad a sus miembros. Lo operaron, sacándole un tumor, por suerte benigno. Cuando Julio ganó en el festival de Benidorm, parece que el horizonte de aquel padre, siempre tan positivo y amable con la prensa, se empezó a aclarar, haciéndole sentirse ufano, alegre y confiado, tanto que ETA aprovechó para secuestrarlo y confinarlo en un zulo de Trasmoz (Zaragoza), pidiendo un rescate de mil millones de pesetas (más de 6 millones de €), pero el 19/2/1982, los GEO lo liberaron. Marchó a Miami, invitado por su hijo, yendo y viniendo muchas veces a España a echar un vistazo a sus negocios y sentirse regocijado cuando la gente le decia «Papuchi». Pocos días antes de morir Charo, se casó con Ronna Keith, 48 años más joven. En el 2004 les nació su hijo Jaime-Nathaniel, teniendo el doctor 89 años. No llegó a conocer a su hija póstuma, Ruth, que nació justamente el mismo dia que su padre hubiera cumplido los 91, el 26/7/2006. ¡Doctor Iglesias, siempre fue usted un gran médico y mejor ser humano y caballero!

Kartaojal

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


*