En otras ocasiones, en mis artículos, me he referido al hecho de que tomamos parte en las decisiones de los jueces, unas veces a favor y otras en contra, sin tener en cuenta que son ellos los que tienen el poder judicial en sus manos, no nosotros, que lo que tenemos que hacer es «no juzgar», pues así nos lo decía Jesús: «No juzguéis y no seréis juzgados (…). La misma medida que uséis para juzgar, será aplicada a vosotros».
Y, ¿por qué digo esto? Pues por el interés tan desmesurado de trasladar los restos del dictador Franco a otro lugar que disponga la familia. Es que el hecho de trasladar los restos de Franco a otro lugar, ¿es tan importante? ¿Por qué tanta prisa? ¿No será el odio y el rencor que algunos gobernantes llevan en su corazón, que dan prioridad a este asunto ante las grandes dificultades que tiene nuestro país? ¿O será para distraer la atención de la opinión pública de otros asuntos más ásperos para los gobernantes?
Adivinando Jesús que sus discípulos lo criticaban, les dijo: «¿Esto os hace vacilar?, ¿y si viérais al Hijo del Hombre subir a donde estaba antes? El Espíritu es quien da vida; la carne no sirve de nada. Las palabras que os he dicho son espíritu y vida».
Como pueden ver, Franco ya ha sido juzgado por nuestro Señor Todopoderoso. Lo que queda de él son sus huesos rotos, sus ropas harapientas, o sea, nada de nada. ¿Qué daño le pueden hacer a la miseria que deja la muerte? Él ya no está allí, su espíritu estará donde Jesús haya decidido en su juicio, hasta incluso puede haberlo perdonado, porque su amor es infinito y por Él derramó su sangre en la Cruz. También dijo: «Dejad que los muertos entierren a sus muertos».
Solamente con haber cambiado las letras de su sepultura, habría sido suficiente. Con decir: «Aquí yace el Dictador Francisco Franco» u otra frase cualquiera que no lo enalteciera, hubiese sido más barato y con menos problemas y polémicas judiciales y políticas.
¿Quiénes son el sr. Sánchez y su Gobierno para juzgar a nadie? ¿Es que creen que ellos no van a ser juzgados? Incluso lo están siendo ya por la opinión pública.
Según estos señores, habrá que exhumar a los cientos de sacerdotes, religiosos/as y personas civiles que asesinaron en los pueblos y llevarlos al Valle de los Caídos. Por ejemplo: Un tío segundo de mi esposa, Guardia Civil en Torrevieja, fue llevado al Moncayo y, allí, asesinado impunemente. Posteriormente, lo mutilaron y, en un bar del pueblo, asaron sus orejas como aperitivo. ¿Quiénes quemaron la Iglesia? Según testigos, algunos que antes se peleaban por llevar a la Purísima a hombros. Luego, ¿qué es la Memoria Histórica? Una chapuza inventada por algunos políticos para seguir provocando el odio y el rencor entre los españoles, por una vergonzosa Guerra Civil que todos deberíamos de olvidar para siempre y que nuestro país renaciera con mentes limpias de recuerdos que, en estos momentos, son inútiles y no llevan a una unión, sino a una división.
Cambiando de tercio, anoche ya oí en la televisión que el gasto se está disparando, lo que nos lleva a un endeudamiento. La Prima de Riesgo lleva una tendencia alcista con respecto al tipo alemán, o sea, que tendremos que pagar más intereses por nuestro endeudamiento, y más cuando vamos a depender de los especuladores, porque el Banco Central Europeo ya comunicó que no compraba más deuda pública.
El déficit de la Seguridad Social en pensiones llegará éste año a 19.500 millones de euros, estando previsto que para el año siguiente alcance los 20.000 millones. Y yo me pregunto: ¿Quién va a pagar todo esto? Seguramente los mismos de siempre, la clase media y los pobres, pues las medidas que dice el Gobierno que va a tomar sobre impuestos ya le empiezan a fracasar.
Hará un mes, aproximadamente, cuando una señorita o señora (lo desconozco) dijo en un pleno del Ayuntamiento de Torrevieja que los bancos deberían comenzar a devolver los 60 millones que les entregó el Gobierno, y eso no es así. El sr. Zapatero decía que no había crisis de cara a la opinión pública, o sea, que estaba engañando al pueblo, al igual que su Ministra de Economía, le entregó a las cajas de ahorro y a algunos bancos pequeños, en dos ocasiones, 30.000 y 7.000 millones de euros a fondo perdido, pues, dado que estábamos en quiebra técnica, con un 8% de déficit, el PIB en negativo, al igual que la inflación, el sector financiero del país, debido a la falta de provisiones suficientes para riesgos, dada la inmensa cantidad de hipotecas que se dejaban sin pagar, se venía abajo y, por lo tanto, nuestra economía se quedaba sin apalancamiento financiero, ya que los bancos no tenían dinero para atender las demandas del crédito y préstamo.
El nuevo Gobierno ha comenzado a romper la baraja. ¿Seguridad Social para todos? Sobre una Seguridad Social ya de por sí deficitaria, que tiene que pedir préstamos para poder pagar las pagas extras de las pensiones, le añadimos un elevado coste en sanidad sin ingresos compensatorios, así es que díganme ustedes qué es lo que va a pasar.
Por otro lado, se ha autorizado a las comunidades autónomas, media décima de déficit presupuestario, por ejemplo: La Comunitat Valenciana terminó el año 2017 con 796 millones de déficit, o sea, un 0,73%, cuando la CEE autoriza un 0,35%. Si seguimos con esta tendencia, tendremos para las comunidades un déficit autorizado por el gobierno del 0,40%. Esto supone, en nuestra comunidad, casi mil millones de deuda, lo que habrá que financiar con capital externo, que es el que cuesta más dinero.
El día 3 de octubre, hoy, la entrevista que el sr. Piqueras, le hizo al sr. Iglesias, y no he visto más desconocimiento de la realidad que en este sr. Tiene un cuento de la lechera aprendido de memoria y, claro, cuando lo cuenta, pues resulta que se sale de la realidad económica y política. Estuvo hablando muy bien del trato recibido en la Sanidad Publica a sus dos hijos nacidos recientemente, pues ambos precisaron atenciones médicas e incubadoras en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid, y yo me pregunto: ¿sabrá este sr. que la Seguridad Social en España la creó el dictador? Yo creo que no.
Carlos García
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