» Representantes vecinales denuncian que en este tramo hay frecuentes accidentes, algunos de ellos mortales
El pasado miércoles, medio centenar de vecinos presentaron en el Ayuntamiento un escrito de solicitud pidiendo que se tomen medidas para erradicar la siniestralidad en la carretera CV-95, que bordea San Miguel de Salinas, especialmente a la altura de la entrada desde Torrevieja por la urbanización Balcón de la Costa Blanca, y en la zona del Puente de los Canos. Los vecinos han presentado firmas desde el verano en diversas ocasiones pidiendo la supresión de este punto negro de tráfico, donde, relatan, los frenazos y encontronazos entre los coches son habituales, así como los accidentes, algunos de ellos mortales, como el siniestro en el que falleció un camionero torrevejense el pasado mes de octubre, y otro que afectó a una familia alemana. El pasado 10 de diciembre, se organizó otra protesta con muñecos accidentados alrededor de la carretera, registrando un nuevo escrito que aun no ha tenido respuesta, según el presidente de la Asociación de Vecinos San Miguel Arcángel, Manuel Gómez. El representante vecinal indica que la Conselleria de Infraestructuras tiene proyectada la construcción de dos rotondas en la zona, pero que, ante las solicitudes de los residentes, pidió «paciencia» a los vecinos, aduciendo que la puesta en marcha de la futura autovía entre Orihuela y Torrevieja dentro de unos años reducirá la densidad de tráfico en este tramo. Gómez señala que la CV-95 presenta puntos negros similares en Bigastro, donde, en contraposición, ya se ha inaugurado la tercera rotonda, con una inversión de la Generalitat de 300.000 euros, por lo que los vecinos afirman sentirse discriminados. El presidente de la asociación considera esta situación una falta de previsión, sobre todo del Ayuntamiento, especialmente teniendo en cuenta el nuevo Plan General de Ordenación Urbana, que, añade, prevé la duplicación de la población en la zona.
Protesta vecinal contra una escuela privada sin licencia
Por su parte, el pasado sábado, el colectivo vecinal protagonizó una protesta contra la escuela privada Mar Azul, que, según el presidente de la asociación vecinal, se ha instalado sin licencia en la parte baja del centro social y acumula dos órdenes de cierre del Ayuntamiento desde el pasado mes de noviembre. Gómez indica que al problema de que el centro se encuentra en unas instalaciones «no adecuadas», con numerosas antenas de telefonía en el tejado, se suma la construcción de una pista deportiva para uso del colegio. Las instalaciones de esta escuela en Torrevieja fueron igualmente denunciadas por los vecinos por carecer de licencia y no ser aptas para uso educativo.
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