Después de esta carta, que no sé si saldrá publicada porque tienen que estar cansados de tantos dimes y diretes, nada más quiero decirle que me olvide, que supongo que tendrá cosas más serias que hacer, aunque su situación laboral poco tiempo le roba. En fin, trabaje por esa asociación cultural andaluza que están formando y que van por los bares pidiendo una sede, pero no olvide que, según los recortes de prensa, que están a disposición de quien los pida, ya fue secretario de una, y su señora la presidenta, y no les fue tan bien como consta en asociaciones de Castilla y León, y se tuvieron que ir sin lavarle la cara, como pide la señora Martínez para la nuestra, pero parece ser, por lo que leo, que la cara de la asociación cultural andaluza Zambra la mancharon ustedes. También quiero decir a Santiago Ramón Rubio Manchón que se dedique a su Fartuquín y consiga asociaciones que monten en su bar la sede para que todo quede en casa: asociación nueva, bar lleno. Ramón, llevo mucho tiempo sin verte, no me toques las narices, por favor; dedícate a lo tuyo y cállate que estás más guapo.
Juan Carlos Lázaro Sánchez
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