Ansia demoledora

Dora Fernández Navarro
Concejal y miembro de la ejecutiva local del PSOE de Torrevieja

Una vez más, los grandiosos proyectos de nuestro alcalde están al margen de las necesidades reales de los ciudadanos. Me refiero a su ambicioso proyecto de construir una postal marítima y en cuyo plan el Real Club Náutico de Torrevieja será destruido para volverlo a construir unos metros más alejado de su actual ubicación, pero, eso sí, con un aire más moderno y dinámico, según los criterios de dicho plan.
A todas luces, este proyecto no lo necesita nuestra ciudad. Antes hay muchas otras cosas que se podrían hacer, como por ejemplo: solucionar de una vez el problema de la «Plasa», unificar todas las aceras de la ciudad, hacer una ciudad más amable creando carriles bici urbanos que comuniquen fácilmente con las urbanizaciones más próximas, incluso con el hospital, etc.
Por otro lado, necesitamos de nuestras referencias históricas, y el Real Club Náutico es un referente para los torrevejenses. Éste es un edificio emblemático, que, lejos de destruirse, se debería proteger, incluso institucionalmente, declarándolo de interés turístico, puesto que este club social forma parte de la historia torrevejense y de su idiosincrasia. Además, su construcción es sólida y armónica en su conjunto, bien conservado y actualizado interiormente, conserva su carácter sesentero que lo hace entrañable y necesario para, estoy segura, la mayoría de los torrevejenses.
Señor alcalde, Torrevieja no le pertenece para andar jugando con proyectos fantásticos y megalómanos que luego pagaremos todos los ciudadanos durante décadas. Además, antes de llegar a esa postal marítima que recuerde sus años de gobierno, más bien habría que procurar conservar lo poco que queda en pie de la historia torrevejense, porque es necesario tener algo para recordar.