Amapola Prado Jara
Presidenta de Asila
Sr. Manzanares, más asombro me causan sus manifestaciones y lo poco que cree usted en la democracia de este país, donde usted me niega el poder expresarme con claridad sin estar afiliada a ningún partido y además por ser presidenta de una asociación. Pero me causa más sorpresa en primer lugar que usted acuñe un término, «nuevos valencianos», que existe gracias a la Consellería de Inmigración. Es por este término que siento más admiración por el sr. Camps, pues ha sido el único presidente de una comunidad autónoma de España que se ha tomado la molestia de crear una Consellería de Inmigración; independientemente de su ideología política, como persona y político me ha demostrado, con hechos, que quiere realmente hacer algo por los inmigrantes, apoyándolos con cultura y educación al crear las ESCUELAS DE ACOGIDA. Por cierto Asila es una de ellas en la Vega Baja, creo que usted no lo sabe. Es por eso que me permito hablar en nombre de los inmigrantes que represento en mi asociación, los cuales están totalmente de acuerdo con mis palabras. Usted, en un burdo y lamentable ejercicio de retórica, está intentando politizar unas manifestaciones que nada tienen que ver con la política y sí mucho con la inmigración. Yo defiendo a mi asociación y estaré apoyando y ayudando al dirigente que demuestre su compromiso con el más desfavorecido y el más necesitado, el inmigrante. Para nosotros, esa persona es «un hombre de bien».
Ahora, si lo que usted pretende es entrar en juicios de valor sobre escándalos diversos, le recuerdo que a muchos militantes de su partido también les han caído diferentes calumnias, o verdades, sobre supuestos o reales abusos de poder y similares. Lo más fácil de este mundo es calumniar y destruir, de esta forma se deja una gran mancha, y después apáñatelas como puedas para quitártela. Nosotros no entramos en ese juego.
Cuando habla de que el PSOE fue quien abrió las puertas a la legalización de muchos inmigrantes que estaban en situación irregular, yo ni siquiera estaba en Torrevieja. Con esto no quiero eludir una respuesta, pues, particularmente, considero que fue una gran medida, porque ayudó a muchas personas como usted dice. Si en ese momento hubiera sido presidenta de Asila, también hubiera aplaudido la medida. Usted quiere resaltar las bondades del Gobierno central, que curiosamente ahora ha lanzado una campaña de busca, caza y captura del inmigrante. Pero el tema de la Ley de Inmigración es algo a tratar con mucha más calma de lo que permiten estas pocas líneas.
Si usted pretende que los méritos del PSOE en el tema de inmigración sirvan para quitar méritos a otras medidas muy acertadas que están tomando otros políticos, creo que lo único que puede aportar al panorama político actual es lo que hay, disputas y críticas destructivas que al ciudadano lo tienen bastante cansado.
Nosotros, como asociación, aplaudiremos y apoyaremos a los gobernantes que hagan lo necesario para que el inmigrante no se sienta ni marginado ni perseguido en el lugar donde ha decidido buscar una oportunidad para conseguir una vida mejor, que al fin y al cabo es lo que todos pretendemos.
Por último, le diré que mis asociados entienden perfectamente una cosa, quién les ayuda y apoya y quién no. Ellos no miran siglas de partidos, son algo más inteligentes de lo que usted pretende, se fijan en el gobernante, y si ese señor es capaz de sensibilizarse con sus problemas e intentar darles solución, para ellos, y para mí, será «un hombre de bien».
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