Tenemos en Rocío del Mar (que también es Torrevieja) un «paseo peatonal» junto al mar. Estuvo señalizado por una placa que decía «ACCESO PEATONAL», hasta que alguien la quitó. Ahora, ese paseo, que se suele llenar de familias con niños pequeños jugando con patines o bicicletas, o simplemente paseando junto al mar, se ha visto invadido por coches, motos, quads… que, en algunos momentos, llegan a tomarlo como pista de carreras, y últimamente se ha visto invadido como aparcamiento para los coches de los que tienen que llegar sobre las ruedas hasta la mismísima playa, a pesar de que hay suficientes lugares en los alrededores, a no más de una manzana, donde aparcar, sin invadir el poco espacio que les va quedando a los peatones en este mundo. Lo mas grave es que, ante la falta de respeto a las más elementales normas de educación, los que entran con los coches lo hacen sin preocuparles que haya peatones, poniendo la vida de éstos en grave riesgo. ¿Qué esperan las autoridades para señalizar debidamente el paseo? ¿Quizá esperen algún niño atropellado mientras corría detras de su pelota? Pedimos a las autoridades municipales que tomen cartas en el asunto antes de que suceda una desgracia que luego ya no tendrá remedio.
V. Moreno
opino lo mismo que el sufrido escritor que hace el comentario del paseo de Rocio del Mar,la verdad es que siempre estuvo cuidado, con el famoso cartelito de -solo peatones- y pienso que el municipio debe sentar catedra y prohibir en ese paseo, el desbarajuste de vehiculos, patinetes, bicicletas, gente jugando al futbol y prohibicion total de aparcar coches. Este paseo se hizo para solaz de veraneantes y gentes del lugar, cerca de la playa y como paseo delicioso a las orillas de nuestro mediterraneo. Por eso, prohibicion total
de todo tipo de artilugios con ruedas, se debe respetar en todo momento -el paso de peatones,y los letreros de prohibicion, deben ser restablecidos por las autoridades municpales y controlar que esta en vigor esta prohibicion, mediante los servicios de vigilancia municipales… Hasta ahi podiamos llegar, con lo bien que se pasea por alli, libres de trastos con ruedas, y vehiculos de todo tipo. paco sastre