Fernando Guardiola
El pasado domingo, en el Teatro Municipal, tuvo lugar, con la participación de la Unión Musical de Crevillent y la Unión Musical Torrevejense, un concierto «extraordinario». La palabra «extraordinario» tiene varias acepciones, entre ellas: «Acto que se hace en situaciones especiales» y «que destaca por su ejecución o cualidades», y ambas le vienen como anillo al dedo al concierto al que me refiero. Si Terpsícore, «Musa de la Música», hubiera acudido al recinto al oír las notas que salían de sus instrumentos, se hubiera tenido que sentar en la escalera, pues el público abarrotó el aforo teatral, al que acudieron más de 200 personas de la ciudad hermana de Oviedo, que se encuentran pasando unos días en nuestra ciudad.
Abrió el fuego la UMC, dirigida por Francisco Beltra, que interpretó el pasacalle «La Corrida de Beneficiencia», de Chapí; la Obertura «Rienzi» de Wagner y una selección de «Los Miserables» que entusiasmo al respetable. Tras una pausa, la UMT, bajo la batuta de su director Jaime Belda, interpretó «L’Arlessienne», de Bizet; «Lohengrin», de Wagner; la «Marcha eslava», de Tchaikovsky; la muy aplaudida «Granada» y una espectacular versión de «El tambor de Granaderos», de Chapí, al que se sumaron varios bises, entre los aplausos de un satisfecho público, que disfrutó de lo lindo con un concierto de «altura».