Una ciudadana de a pie no deja de asombrarse ante la política y los políticos, que, sin rubor alguno, se tiran los trastos a la cabeza. Se sacan los trapos más sucios y, «lanza» en ristre, van al acoso y derribo. Unos con más encono que otros, pero todos queriendo lo mismo: mantenerse en el poder el que lo tiene, e intentar conseguirlo el que lo ha perdido. No hay reglas. Es «combate libre», en cuanto a dialéctica corrosiva, de desgaste. Todo vale, en ese debate de quítate tú para ponerme yo. Corrupción e inoperancia son armas arrojadizas; entretanto, los ciudadanos de a «pelo» asistimos inquietos y alucinados ante tanto rifirrafe, pues, con la que está cayendo, más les valiera arrimar el hombro y remar todos en una misma dirección. Pero claro, todo este desbarajuste propiciado por las ambiciones de unos criminales desaprensivos de «guante blanco» que dirigían y manipulaban el cotarro mundial se lo ha puesto «a la carta» a los aspirantes a conseguir el «señor» poder.
A nivel nacional, se mezclan churras con merinas; a nivel comunidad, merinas con churras; y a nivel de nuestro pueblo, mar de «fondo». Una rotura o quiebra, dentro del partido que nos gobierna, de los dos pesos pesados del mismo: el señor alcalde y el hasta hace poco segundo de a bordo, Domingo Soler, que dan la nota por ver quién se lleva, a mar revuelto, el «gato del poder».
Esta querencia por el poder es de siempre. Tanto en las realezas, que antiguamente se mataban entre la propia familia, padres hijos y hermanos, y aún hoy se cuestionan entre ellos los derechos dinásticos; como en las terribles dictaduras y en el hoy de las democracias, y es que el «pastel» del poder es muy goloso. Y una que es ignorante pero algo «lúcida», se pregunta:
¿Qué tiene el señor poder/ que todos quieren hacerse con él?/ Que es «alto, guapo»/ y «pobre» no es./ Si no detentara miles de prebendas,/ cargos «sustanciosos»,/ millones y «hacienda»,/ si no fuera tal como es,/ nadie querría hacerse con él.
Josefina García
sobre el tema de quien tiene el poder, debe ser una persona salida de las urnas naturalmente pero que sea honesta.-que sea asequible al publico que le ha votado y al que no, es decir, si detenta el poder,tine que atender a todos los que se acerquen a el, en busca de ayudas,que sepa llevar el poder con dignidad, que no se rodee de amiguetes que le rian los chistes, que se preocupe de su ciudad, de sus ciudadanos,que estos,esten contentos,que mire por los impuestos y que cuando deba bajarlos, lo haga, no como ahora, que con la que tenemos encima, solo se preocupan de subirlos-lease el reciente recibo de la contribucion-que ni siquiera se molestaron en bajarlo, cuando sabian que las viviendas se habian dcasi un 30 por ciento-sin embargo al señor poder,en la actualidad,le importo un bledo, y subio el ibi, y otros impuestos como el agua,basuras etc…eso es lo que debe ser un señor que ostente el poder,poder, para estar al lado de los ciudadanos, escuchar a los ciudadanos, mirar por ellos y no llenarse los bolsillos con prebendas,repartir a los pobres que no tienen que comer, dar ayudas a los que lo necesiten,y ese señor poder, sera querido por los ciudadanos y no los prebostes que nos gobiernan.que solo miran para ellos y tratar de conseguir cada vez mas cosas, pero,,,para ellos, no para la ciudadania.ahi radica el poder, el verdadero poder, y no la lucha para vencer al contrario para acumular el poder y hacer lo mismo al llegar a el.