Me llamo Izabela Bercaru. El día 7 de agosto viajé en el autobús línea B Torrevieja-Torretas. Estuve con mi hijo que tiene sólo 3 meses.
Cuando subí al autobús (parada cerca del Parque de las Naciones), el conductor empezó a gritarme que le molestaba mi carricoche. Quise viajar hasta las Torretas, pero tuve que bajar del autobús en la parada de Carrefour, porque el conductor seguía gritándome y preguntándome cuándo pensaba bajarme porque no le parecía muy bien que viajara con el carro. Mi niño empezó a llorar y decidí bajar mucho antes de lo previsto, porque el conductor no me dejaba tranquila.
Quería preguntar al director de Costa Azul: ¿Quién conducía el autobús con matrícula 4535CLM, el día 7 de agosto a las 12:16 (parada Carrefour)? Le hago esta pregunta porque no me parece bien cómo trata este conductor a los viajeros, sobre todo a las madres con hijos pequeños. ¿Qué culpa tengo yo, u otras madres, de que los autobuses no estén adaptados ni para carricoches, ni para minusválidos? No pienso esperarme 2 horas más en la parada sólo para entrar en un autobús adaptado a los carricoches. Todos tenemos prisas y todos tenemos los mismos derechos de uso de transporte urbano.
Quería saber si la compañía Costa Azul piensa adaptar los autobuses a las necesidades de minusválidos y de madres con hijos.
En otras ciudades, los conductores incluso ayudan a subir los carricoches a los autobuses. Aquí ni siquiera les dejan entrar…
¿Y qué pasa con los minusválidos? ¿Cómo pueden viajar desde Torrevieja hasta las Torretas? ¿Usando un taxi que no podrán pagar?
Espero sus noticias.
Izabela Bercaru
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