Salvador García Hernández
Presidente de la Asociación Cultural de Pensionistas de La Mata
Las asociaciones normalmente las crean personas con ánimo de ayudar a los demás y sin ánimo de lucro. Estas personas que crean estas asociaciones son creativas y siempre se han destacado en su vida laboral por algo, no es gente normal, tienen inquietudes con capacidad de organizar, crear, incluso de mandar. Lamentablemente, la asociación muere con ellos cuando por cualquier circunstancia desaparecen.
Estas personas dedican parte de su tiempo a planificar con todo detalle los actos, para que sus socios y amigos estén activos. Recorren organismos oficiales, empresas, comercios, etc., para solicitar ayuda para sus socios, cuando serían incapaces de pedir para ellos mismos.
Hay personas, sobre todo mayores, a las que, gracias a estas asociaciones, les cambia su vejez, ya que las mantienen con la mente activa, con trabajos manuales, con excursiones, bailes, bingos, comidas camperas, y rutas turísticas.
Los que crean estas asociaciones tienen una gran imaginación, hacen una fiesta de cualquier cosa, fin de año, San Valentín, Carnaval, entierro de la sardina, sardinadas, plantaciones, bingos, concursos, cumpleaños, etc., etc.
Estas asociaciones hacen una gran labor social en las ciudades y en pueblos, ya que los Ayuntamientos no tienen personal para estos menesteres, porque estos señores tan creativos no se hacen, «nacen». Los Ayuntamientos de todo color político siempre colaboran con este tipo de asociaciones por la cuenta que les tiene, ya que son colectivos que a veces pueden llegar a ser conflictivos si no se les reconoce su labor; que, afortunadamente, tarde o temprano siempre reconocen.
Es lamentable que gente desinformada y con la peor intención, con mentalidad de parásitos más bien ruines, critican en algunos foros, sin conocimiento alguno, el trabajo diario y humanitario que estas personas realizan en beneficio de sus semejantes.