Los Verdes han presentado una batería de preguntas a las Cortes Valencianas para conocer la situación de las obras y la financiación de los proyectos del Plan Confianza en Torrevieja que se encuentran paralizados por la «bancarrota» de la Hacienda Pública Valenciana. El grupo denuncia el «bloqueo» que desde hace más de 4 años sufren algunos de los proyectos, al tiempo que afirma que los ocho proyectos contratados han tenido «desigual suerte» en función de la situación financiera de las empresas adjudicatarias de cada obra. Es el caso de las adjudicatarias de la II fase del Museo de la Semana Santa o del Recinto de Mercados que, según apunta, «se negaron a continuar las obras ante los impagos del Consell». Los Verdes consideran que el PP debe explicar a los ciudadanos la situación de estos proyectos, «en vez de colaborar ocultando la verdad».
Si la Comunidad Valenciana hubiera tenido la financiación per cápita que le corresponde, ya hubiera cumplido de largo con el déficit.
Y si tu amo hubiera hecho las cosas bien y honradamente seguiría siendo diputado.
Si la Comunidad Valenciana, hiciera lo que sus lideres prometieron, expulsar a todos los imputados y condenados pperos, os quedabais en paños menores. Entonces si que podría salir adelante.
PORQUE NO TE CALLAS BOB.
Soy de Madrid España llege hace un año con ganas de empezar una nueva vida pero todo me fue mal.
como a miles de Españoles Torrevieja no es una ciudad hospitalaria es de 15 días y a casita no se porque a los de Madrid nos tienen tanta tirria pero bueno tendre que sobrevivir con lo que hay
Si los nefastos gobernantes que ha tenido la C.V. no hubieran malgastado en proyectos megalómanos y costosos (Ciudad de las Artes, Ciudad de la Luz, Aeropuerto en Castellón, etc., etc.), además de innecesarios, si no hubieran colocado al frente de nuestras cajas de ahorros a ineptos gestores y a golfos amiguetes que han dilapidado el capital de todos los valencianos, si hubieran sido un poco honestos en su gestión de los fondos públicos, no estaríamos ahora mismo con esa insalvable deuda que obliga a recortar en servicios esenciales como la sanidad o la educación para poder pagarla.
Prometer obras e inversiones, sin el presupuesto adecuado, tiene este resultado.
Ahora, para gambas, saraos y derroches varios, no falta en la Comunidad Valenciana, nido de la corrupción española y europea.