Domingo Soler Torregrosa
Concejal Alternativa Popular de Torrevieja
Crear una feria y darle el sitio del Paseo de Vista Alegre con el único objeto de que no se pueda instalar este verano la venta ambulante ilegal, es de lo más vergonzante que yo he visto en política en Torrevieja.
Y es que la autoridad en el siglo XXI se reconoce pero no se ejerce. Eso era de otros tiempos en los que eran habituales las carreras y los palos. Pero lo que no ha cambiado es el hecho de que el principio de autoridad es fundamental cuando alguien tiene la responsabilidad de gobernar. Por eso yo me pregunto: ¿quién será esa cabeza pensante en el equipo de gobierno del PP de Torrevieja?
El comercio de nuestra ciudad vive un momento agonizante y este ‘equipico’ de gobierno se cree que poniendo una pancarta y un camello en la calle Caballero de Rodas todo se arregla. Pues no, es un problema que va más allá y para encontrarle solución requiere un cambio mucho más profundo.
La venta ambulante ilegal es un problema aquí y en todos los lugares y la solución es colectiva, no individual. Crear una fuerza de la policía local para enfrentarse a este tipo de venta es lo más irracional y patético visto en Torrevieja y de nuevo me surge la misma pregunta: ¿quién será la cabeza pensante?
Este verano pueden pasar muchos percances con esta actitud. Por eso, desde aquí, responsabilizo al mando o a la autoridad que dé la orden para intervenir, sabiendo que no tenemos ni cobertura ni preparación para esas actuaciones que no son propias de la policía local. Ellos deben ocuparse de otras cosas: de las de su competencia, que tienen un gran valor e importancia. Pero no, las órdenes que les llegan desde el equipo de gobierno, que actúa como si estuviera delante de un monopoly, es la de ir contra la debilidad de un mundo real de unas gentes que lo único que quieren es sobrevivir. Y por eso han creado, en un ejercicio de soberbia desmedida, sus propias fuerzas de choque para jugar este verano. Y mientras, ¿qué? Mientras no tenemos pintados los pasos de peatones, los semáforos no funcionan, los coches de nuestra policía son antiguos… Y eso imposibilita que nuestros efectivos cumplan con su verdadera labor.
En fin, que el verano se presenta difícil, complicado y mucho más. ¿Por qué? Pues porque los que están al frente no son otros que un equipo de gobierno del PP inmaduro, irresponsable, incierto, perplejo, indeterminado, dudoso, dubitativo, confuso, indeciso, vacilante, irresuelto, titubeante, tornadizo y cobarde.
Antonio Machado decía que “en España, de cada diez cabezas, nueve embisten y una piensa”. Y yo me pregunto una vez más: ¿quién será el del equipo de gobierno de Torrevieja que piense?
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