Gracias, Raúl

Domingo Sánchez
Actor y bailarín torrevejense

Hay personas que se cruzan en tu camino y te marcan tanto que dejan huella en ti para siempre. Son esa clase de personas que, aunque pase mucho tiempo, están ahi, y cuando te paras a pensar, te alegras de pertenecer a su círculo. Raúl ha sido siempre una referencia para mí. Fue mi primer profesor de teatro, el que me descubrió lo que es una cuarta pared, una entonación, una cadencia y semicadencia, la proyección vocal… Me enseñó lo que era el teatro, no sabía en que lío me estaba metiendo… y siempre le estaré agradecido.
Gracias a su escuela, pude hacer amigos, divertirme e interpretar: “Bajarse al moro”, “El anillo mágico” , “Bodas de sangre”, “Los productores” y otras muchas obras a su lado, durante unos años maravillosos que guardo en mi corazón con gran recuerdo.
Era una persona increíble, que se hacía de querer; siempre que le pedías un favor, ya fuese una sala para ensayar, un traje o cualquier atrezzo para alguna actuación, era el primero en abrir su escuela y dejártelo, también me preparó durante todo un verano para las pruebas de acceso a la Escuela Superior de Arte Dramático sin cobrarme nada y ocupando tiempo de sus vacaciones, en fin,  se le va echar mucho de menos…
Innumerables momentos vividos con él y su familia…
Grande Raúl y grande tu corazón, nunca podré olvidarte. Hace tres semanas fue la última vez que te ví, me dijiste que me veías en todas partes y estabas feliz por mis viajes fuera y por lo del videoclip…
Quien nos iba a decir que era la última vez que hablaríamos…Gracias por todo lo que me enseñaste como profesional y como persona.

Gracias, Raúl.