Estimados contribuyentes, digo increíble pero cierto, y me explico.
El firmante de este artículo, como contribuyente, está hasta el «moño» de tener que aguantar las declaraciones de individuos como el sr. Eduardo Dolón, ex-alcalde de Torrevieja, que, con la crisis actual, se lleva a su «buchaca» 75.000 euros al año más «pluses» y con coche oficial incluido, de la Diputación de Alicante, es decir, dinero público; y el sr. Pizana más de lo mismo, ya que, con ser un enchufado a DEDO, se lleva 41.076’84 euros anuales, y todavía ambos no han entregado su acta de concejal en el Ayuntamiento torrevejense por acumulación de cargos públicos.
Estos elementos, que han contribuido durante estos años pasados con su actividad política a que Torrevieja sea hoy la ciudad más pobre de España, no tienen ningún derecho ético y moral a criticar al actual Gobierno municipal torrevejense, que en los pocos meses que lleva gobernando, trata de solventar lo mejor posible el desaguisado que ha dejado en herencia el PP, después de 27 años gobernando en Torrevieja.
Como contribuyente que pago mis impuestos, no hay derecho a que hayamos mantenido durante años a toda esta cuadrilla de impresentables, del PP, para que vengan ahora diciendo que el actual Gobierno municipal torrevejense está ocultando su gestión anterior de los últimos 4 años. Venga ya.
A esta gente del PP torrevejense hay que recordarle que aquí no se tapa nada, pues públicamente toda la ciudadanía está al día de los desmanes, fuga de dinero público, y, como ejemplo, las chapuzas del Teatro Municipal con sus presupuestos, las presuntas «chorizadas» del Balneario de Lodos, Caballero de Rodas, los pagos de millones de euros sin facturas, ni contrato, de dinero público, etc. Que venga el sr. Albaladejo diciendo tonterías para justificar lo injustificable de sus actuaciones políticas pasadas no tiene sentido.
Estos artistas se amparan en que la Fiscalía Anticorrupción no actúa de oficio, para tirar de la manta y llevar a más de uno a hacer compañía al mancebo en el hotel público murciano.
Un tema que me preocupa es la actuación política de la concejala del PSOE África Celdrán. Desde mi punto de vista, África tenía que dimitir por su modo de proceder últimamente. Los errores en política tienen un precio: la dimisión. Ésa es la diferencia entre «ellos y nosotros».
Seguimos galopando…
¿Hasta cuándo? Al tiempo.
Gerardo Garrido
Hay algunos que se han quedado colgados de (no han superado) el Franquismo y el gobierno del Partido Popular. Y las cosas que no se superan, se enquistan y terminan por podrirse dentro. Cuándo? Al tiempo !