Era a la salida de la Catedral de Palma, cuando fue Doña Sofía, con todo su cariño, a hacerse una fotografía con sus nietas, y la niña -me refiero a Doña Leonor, Princesa de Asturias- le quitó la mano de muy malas formas.
Pero es que la madre, nuestra Reina, Doña Letizia, se puso enmedio y disimuladamente y con su propia mano, no permitió que Doña Sofía se hiciese una fotografía con sus nietas.
Y eso no se puede permitir. No se le puede hacer eso a una abuela que sólo deseaba expresar, verter su amor por sus nietas.Y menos que a nadie, a Doña Sofía, gran señora que ha surido mucho y aguantado más, que es una madre y una abuela modelo, y Reina de España durante muchas décadas, y siempre con un comportamiento intachable.
Vuelvo al gesto de la Princesa de Asturias. Que ella haya hecho eso es muestra de mala educación. Y la mala educación en la futura Reina de España es muy grave. Porque en España se tiene que proteger y honrar mucho a los abuelos. Porque les debemos a ellos y a ellas la España que tenemos. Y eso que vi me dolió en el alma. Y no únicamente a mí, sino a muchísima gente, a toda mi familia y prácticamente a todas las personas con que hablo y me trato.
Y eso no puede ser en mi país. Yo quiero otro tipo de personas en la cumbre, más humanas, no con mala educación, frialdad y alma de hielo. Eso no lo quiero para España.
Y me preocupa aún más el mar de fondo. Porque con ser muy grave lo visto, porque, repito, a los niños hay que inculcarles amor y respeto por los abuelos y abuelas, he sabido que de las niñas cuida una chica cuando alguna vez acuden a montar o ver a un pony; la chica, que quiere muchísimo a Doña Sofía, la avisó para que pudiese ver a las niñas. Y luego supimos que Doña Letizia quiso o se propuso despedir a la chica. Esto lo ha visto todo el mundo en la televisión.
Me pregunto qué es lo que está pasando ahí. ¡Qué educación tan terrorífica está dando Doña Letizia a esas niñas, con esa frialdad que espanta! Eso no puede ser y los españoles hemos de hacer algo para corregirlo. Y no puede ser, porque Doña Leonor será un día la Reina de España, cabeza de una gran nación y de una Monarquía de muchos siglos, y ella, nuestra futura Reina, quiero que sea ejemplo de valores y de amor y de respeto a sus abuelos.
Personalmente, pienso que es el momento para que Doña Letizia reflexione y corrija lo que ha hecho mal. Mejor sería que pidiese perdón públicamente a Doña Sofía y, de paso, a todas las abuelas y abuelos de España, que se han sentido dolidos. Queremos una Reina amable, una persona correcta y, sobre todo, respetuosa con los abuelos.
Delfina Teresa Sanz Cornago
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