» Vecinos reclaman al Ayuntamiento que reubique las playas de perros
» Sueña Torrevieja exige al Gobierno local medidas contundentes contra los «saboteadores»
Por segunda vez han aparecido arrancadas las señalizaciones que autorizan el uso provisional de las dos playas de perros en Punta Margalla y Cala del Moro. Las playas caninas abrieron a primeros de semana tras la publicación del decreto que permite su uso. Los carteles identificativos ya se han repuesto. El concejal de Playas, Javier Manzanares, tildó en redes sociales de «lamentable» la actitud de los responsables del hecho y animó a los usuarios a acudir con sus mascotas de forma libre. Vecinos de Cala del Mal Paso (conocida como Cala del Moro) se concentraron ayer para reclamar al Ayuntamiento que reubique la playa de perros en otra zona. Por otro lado, en redes sociales circula la convocatoria de varias quedadas en Punta Margalla para defender la playa de canes bajo el lema «a favor del civismo», una para este sábado a las 10 horas y otra para el lunes a las 18 horas.
Medidas urgentes
Sobre este asunto, Sueña Torrevieja ha exigido actuaciones urgentes y «medidas contundentes» contra «los comportamientos incívicos que están sucediendo», señalando que turistas y bañistas están «intimidando» a los dueños de los animales. «No podemos tolerar que estos saboteadores estén vulnerando los derechos recogidos en una ordenanza municipal», añade, «y que gocen de total impunidad». Para Sueña Torrevieja, «los insultos y amenazas recibidas por algunos dueños merecen ser sancionados con absoluta firmeza».
Está prohibido desordenar a los perros en las playas normales. A pesar de esto en las noches o temprano en la mañana hay muchos que rompen los perros. por ejemplo: Playa de los Locos. ¡Personas raras que son alérgicas a las pieles (animales) cuando luego vienen a la playa para divertirse! ¿Por qué el myndegheter no hace nada para detener esto? ¡Incluso los avisos prohibidos de enfurecer a los perros se han ido!
El uso y disfrute de la compañía de mascotas debe restingirse, por motivos de higiene en el ámbito privado. Nuestras calles y plazas presentan un estado lamentable, heces (mierda) de perros y orines con su correspondencia en malos olores y formación de foco de pulgas y otros parásitos, deberían abrir una reflexión sobre la permisividad o no de mascotas compartiendo el ámbito urbano.
Salú2.
«Medidas contundentes» se deberían aplicar contra los que dejan las cacas y orines de sus perros por toda la ciudad. Así como Córdoba es famosa por el olor a azahar en los meses que los naranjos están en flor, Torrevieja se hace insoportable los meses de calor por el olor a orines y heces que se extienden por la ciudad, sin mencionar las cucarachas voladoras de 5cm que salen por los desagües. Se ve que las prioridades del ayuntamiento no están en el orden correcto.
Los perros no deben ocupar espacios urbanos, la plaga de cacas y orines en las calles de Torrevieja ya resulta un problema de primer orden, es imposible la convivencia en el medio urbano, a la desidia de algunos propietarios de recoger las heces se suma la imposibilidad de controlar los orines, no hay rincón, calle o plaza en nuestra ciudad que no sufra sus consecuencias. La tenencia y disfrute de animales y mascotas debería estar circunscrita al ámbito privado.
Salú2.
Los perros no deben ocupar espacios urbanos, la plaga de cacas y orines en las calles de Torrevieja ya resulta un problema de primer orden, es imposible la convivencia en el medio urbano, a la desidia de algunos propietarios de recoger las heces se suma la imposibilidad de controlar los orines, no hay rincón, calle o plaza en nuestra ciudad que no sufra sus consecuencias. La tenencia y disfrute de animales y mascotas debería estar circunscrita al ámbito privado.
«merecen ser sancionados con absoluta firmeza» si eso se hiciera con los incivicos dueños de perros que dejan en las aceras y calles las cacas y orines de sus perros quiza la gente normal y limpia no estaria tan en contra. Es una verguenza como esta la ciudad de heces caninas el olor en dias de calor es axfixiante.
No hay dos sin tres