Con todo el respeto que merece la Corporación Municipal de Torrevieja, quisiera exponer mi opinión, que es la de muchos torrevejenses.
Han acabado con la ilusión de aquellos quienes les votaron, en la creencia del manido eslogan del gobierno de izquierdas progresistas. ¿Dónde está el progreso?
Han pasado ustedes tres cuartos de legislatura criticando a la anterior Corporación, es decir, en lenguaje paladino: han sido la oposición de la oposición.
Torrevieja está más sucia que nunca, y sin visos de enmendar la forma de gestión.
Se han mantenido insensibles hacia la tercera edad, a los hechos me remito:
Cerraron las cafeterías de las casas de la 3ª edad, incluido el CMO, y han sido incapaces de solucionar el problema con un simple concurso de licitantes para su adjudicación. ¡Vergonzoso!
Los servicios públicos permanecen cerrados, salvo en puentes y en temporada estival. ¿Acaso no pagamos impuestos para tener los servicios necesarios? ¡Vergonzoso!
El día 20 de noviembre de 2017 llegué a Torrevieja y los servicios del Centro Cultural Virgen del Carmen estaban averiados, tanto los de caballeros. Marché el 10 de junio de 2018 y los servicios seguían averiados. ¿Acaso no dispone el Ayuntamiento de una brigada para pequeñas obras? Y, si la hay, ¿dónde está el concejal afecto a ese servicio? Seguro que, a la hora de cobrar las dietas o emolumentos que tenga asignados, no hace falta llamarle. ¡Vergonzoso!
El año pasado denuncié el estado de dos bancos de la Plaza del Calvario. Este año sigue igual, da grima sentarse en ellos.
Los aseos del Jardín de las Naciones, los sanitarios están sin tapas, las puertas no cierran, hay que poner a alguien de guardia, para evitar enojosa situación. ¿Dónde está el concejal responsable de parques y jardines? ¡Vergonzoso!
Y ya para terminar, ¿sería muy oneroso dotar de mobiliario -bancos- el trayecto que va desde la Plaza del Molino al mercadillo? Está bien el servicio de bus establecido, pero tengan en cuenta que hay mucha gente que no puede coger el autobús, y verían con muy buenos ojos que la Corporación cerrase su mandato con ese pequeño detalle.
Y entiendo que tomarán buena nota, y si alguna vez vuelven por el Ayuntamiento, olvídense de esas sonrisas profidén y sean eficaces.
Con todo respeto, el ciudadano de pleno derecho
Sebastián Torrecilla Pérez
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