El 29 de marzo apareció en prensa, bajo el título `El duro informe de la interventora de la Diputación sobre la ejecución de la inversión en el presupuesto: «El peor registro del decenio»´, el informe realizado por la interventora de la Diputación de Alicante en el cual pone de relieve la tendencia negativa de las cuentas en los últimos años en cuanto a las inversiones reales en relación con la liquidación del Presupuesto de la Diputación del ejercicio 2021, cuyo responsable máximo es el Diputado Provincial y Alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón, que como de costumbre sigue echando balones fuera culpando a los Ayuntamientos, según él, por no cumplir con los plazos previstos de ejecución de los trabajos que subvenciona la Diputación.
En el caso de la Diputación había liquidado el presupuesto de inversiones de 2021 con un grado de ejecución del 24,09 %, un total de 14,9 millones gastados, sobre los 61,9 millones previstos lo cual representa un grado de ejecución bajísimo.
En comparación, la liquidación del presupuesto del Ayuntamiento de Torrevieja que bate por segundo año consecutivo el récord nacional de ineficacia con una ejecución de tan solo el 51,52 % de los 211,4 millones disponibles, poco más de la mitad, sobrando un total de 102,5 millones, aún contando con un equipo de gobierno en mayoría absoluta de 14 concejales, tres directores generales ejecutivos nombrados a dedo por el Alcalde, varios habilitados nacionales en comisión de servicio y más asesores para el equipo de gobierno que nunca en el Ayuntamiento de Torrevieja. ¡Con todo lo que hay que arreglar en este municipio, se quedan 100 millones de euros sin gastar!
Pero, si profundizamos un poco más en las cuentas, de los 109 millones gastados en 2021, casi 13 millones corresponden a la amortización anticipada de un préstamo del capítulo 9 de gastos, es decir, para regalar el dinero a sus amigos los bancos, por lo que, descontando esto, el grado de ejecución neto, capítulos 1 a 8 de gastos, sería tan solo del 48,38 %, que corresponde a menos de la mitad.
En la liquidación del año 2020 solo consiguieron ejecutar dos terceras partes del presupuesto, con una ejecución neta, sin contar la amortización de préstamos de tan solo el 58,58 %, sobrándole a final de año casi 50 millones de euros, echándole la culpa de su ineficacia al Estado de Alarma.
Podemos comprobar que en el año 2021, sin Estado de Alarma, les ha sobrado más del doble, casi 102,5 millones de euros.
Resulta más que llamativo como la interventora general del Ayuntamiento de Torrevieja suaviza este ínfimo grado de ejecución del presupuesto de inversiones de 2021 indicando en su informe que “a nivel de capítulos destaca el bajo porcentaje de ejecución del capítulo VI, inversiones reales, del que solo se ha ejecutado el 5,6 %, reconociéndose obligaciones por 3.851.495 euros de un total de 68.659.244 euros de créditos definitivos disponibles. Sin embargo, en valores absolutos y pese a ser un año al que presupuestariamente han afectado las consecuencias de la pandemia mundial producida por el COVID 19, la ejecución del capítulo VI, casi triplica respecto a la del ejercicio 2020 (1.274.504 euros)”
Si la interventora de la Diputación de Alicante califica el porcentaje de ejecución del 24,09 % como el peor registro del decenio, la interventora del Ayuntamiento de Torrevieja debería haber calificado el grado de ejecución del 5,61 % como ¡el peor registro del milenio! y en cambio, una vez más, la interventora general contratada por el Alcalde de Torrevieja en comisión de servicios realiza en su informe una valoración que parece más política que técnica y que resuelve a favor de su jefe.
Si de nuevo profundizamos en las cuentas, de los 3,85 millones gastados en 2021, casi 2,5 millones corresponden a la compra de bienes inmuebles, por lo que la inversión productiva real ha sido de 1,35 millones, menos del 2% del total disponible, prácticamente la misma cantidad que en 2020, disponiendo de un presupuesto de casi 49 millones más que en 2020.
Queda acreditada la inoperancia y en definitiva la nefasta gestión a la que somete Eduardo Dolón y el Partido Popular a los ciudadanos y lo que es peor, siguen con sus ventas de humo manipulando datos para seguir sin dar soluciones reales a nuestros vecinos. Es casi seguro que para desviar la realidad nos venderán en prensa que habrá incorporaciones de remanentes a los presupuestos, pero les recuerdo que también las hubo en 2021 y por más que intenten engañar con titulares, fotitos y publicaciones en redes sociales, su gestión municipal es prácticamente inexistente y esta sí que es la auténtica realidad.
Si Dolón (el bueno) no gasta el presupuesto, que nos baje los impuestos y le votaremos hasta el día del jucio final. Yo ahí lo dejo.
Sr No yo votare a la pta mrta de tu mdr