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A cenizas quedaron reducidos los monumentos fogueriles de la Hoguera Molinos del Calvario en la tradicional «cremà» de San Juan, que puso fin a días de intensa fiesta en la calle San José esquina con Joaquín Chapaprieta. La Belleza del Fuego, Marí Carriedo, y el presidente infantil Pepe Montero, se encargaron de encender la mecha de las tracas que dieron paso a las llamas. Previamente tuvo lugar el tradicional indulto de ninots. Un año más, los bomberos se dedicaron a controlar el fuego y a refrescar al público.
Estimado Redactor, siguiendo con nuestro curso de ética periodística y estilo, te aconsejo (dado que somos españoles repobladores del suelo reconquistado al moro procedentes de Aragón), el siguiente titular alternativo: «La quema de la Hoguera Molinos del Calvario puso fin a las fiestas de San Juan».
Gracias, muchas gracias.