Irene Villalobos Santos
Simpatizante de Los Verdes de Torrevieja
El 25 de noviembre, Día Mundial de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, debe ser un día marcado en el calendario. Un día triste, pero a la vez cargado de esperanza; la de estar en el convencimiento de que algún día lograremos erradicar la lacra de la violencia sobre las mujeres. Aunque nos cueste años y recursos; entre ellos, el principal, la educación. Es un día para el recuerdo de las que ya no están y han dejado en el camino hijos, padres, hermanos, amigos, proyectos e ilusiones. Para que las que, en este momento, están sufriendo cualquier tipo de violencia machista, entiendan que no están solas, y que de ahí se sale, aunque ahora mismo les parezca imposible.
Y también es un día para recordar que ahora más que nunca es cuando debemos mantenernos firmes y no dar ni un solo paso atrás. Precisamente, porque muchos contemplamos, con una mezcla de tristeza, rabia y pavor, como cada vez se oyen más voces críticas con la ley de violencia de género y más voces que cuestionan su utilidad.
Sin embargo, ahí están los datos:
– En España, desde el año 2003 hasta hoy, se han contabilizado 1 171 víctimas de violencia de género.
– Según datos de Amnistía Internacional, el 5?% de la población femenina ha sufrido alguna vez en su vida violencia física o sexual a manos de un hombre.
– Según esta misma fuente, el 24 % de las mujeres jóvenes entre 15 y 19 años, ya la han sufrido este tipo de violencia alguna vez.
– En lo que llevamos de año 2022, en nuestro país han fallecido a manos de sus parejas o exparejas 38 mujeres.
– Antes del año 2013 no se contabilizaban las víctimas de violencia machista que no mantenían relación sentimental alguna con su asesino, así como tampoco las agresiones sexuales, ni los niños y niñas asesinados a manos de su padre con el objetivo de destruir a su expareja. Esto significa que el número de víctimas de violencia machista, desde el 2003, es muy superior a las 1.171 antes mencionadas.
Esto son solo pinceladas, hay muchos más datos que ponen de manifiesto la necesidad que tiene nuestra sociedad de seguir luchando por la igualdad. Sobre todo, porque sabemos que aún nos queda mucho para que esto solo sea un mal recuerdo. Pero si hay algo especialmente sangrante es comprobar la hipocresía y cinismo de ciertos partidos políticos, que el día 25 se colocarán con toda la poca vergüenza el lazo violeta, mientras pactan con partidos que quieren derogar la ley de violencia de género y entorpecen el avance de políticas progresistas que inviertan en educación, pilar fundamental para luchar contra esta pesadilla. No todo vale.
Pero, volvamos a poner el foco en lo importante, porque los métodos de ciertos políticos, ya los conocemos todos. A las que están en estos momentos atravesando una situación que solo conoce quien la ha vivido, que sepan que no están solas. Solamente es necesario dar el primer paso, el más difícil. Pedir ayuda.
Por suerte, gracias a la lucha de muchas personas, hoy en día existen leyes que las protegen y que las van a ayudar a salir de ahí. De eso se trata. Proteger esas leyes. Seguir legislando contra estos abusos. Y no permitir que nadie intente volver atrás.
«Mucho por hacer»
Irenita, lo primero: derogar la nefasta ley Montere de tu tocaye que está axcarcelando a muchos delincuentes sexuales (Manolete, si no sabes torear, ¿pa qué te metes?)
De las violencias abortistas, ¿no dices nada?
¿Y de las violencias infanticidas feministas tampoco? (si el de los hombres -estadísticamente menor- es machista…)
A ministry denominated as «Equality» which in reality only promotes hate, given that in theory, it seeks the supremacy of women over men but in practice, the only thing it knows how to do is to look for and point to problems where there have never been any and, in doing so, provoke confrontations between all the humans. A ministry that doesn’t have an iota of equality. It only spends more than 500 million a year on bullshit and crap to stay in its seat on the throne.
And now, so that the tap doesn’t turn off, it turns out that judges are sexist and misogynist, when two thirds of them are women. And of course, what used to be called «jarabe democrático» is now political violence.
There is not even any dignity left for these hooligans. But that doesn’t matter if El Dorado can still be pursued, whoever falls.
HYPOCRISY PURE AND SIMPLE!
Well said, Paul, but remember that Gibraltar is Spanish. ¿When are you going to return it?
Well, you clever bugger… Just because I speak English doesn’t mean I am British. But if you want Gibraltar back, just make a time machine and go back to 1713 and tell Philip V not to sign the Treaty of Utrecht. Or if he does, tell him to leave Gibraltar out of the plans. You’re welcome.
Pablito Chuches, España cedió Gibraltar a Gran Bretaña por el Tratado de Utrecht, del que se cumplieron 300 años en julio de 2013, con tres condiciones clave: (1) la limitación del territorio cedido; (2) la falta de comunicación con zonas vecinas; y (3) el derecho de retrocesión a España en caso de que Gran Bretaña quisiera cambiar el régimen pactado. Interpretando esta última condición, se llega a la conclusión de que según el Derecho Internacional y las resoluciones de la O.N.U hay razones para mantener que España ha recuperado ya sus derechos sobre Gibraltar, aunque continúe una presencia británica. Esto se debe al cambio del estatuto de Gibraltar que el Reino Unido llevó a cabo a través del referéndum de 2002 y la Orden Constitucional de 2006.
Pablito Chuches, Spain ceded Gibraltar to Great Britain through the Treaty of Utrecht, which celebrated its 300th anniversary in July 2013, with three key conditions: (1) the limitation of the ceded territory; (2) the lack of communication with neighboring areas; and (3) the right of retrocession to Spain in case Great Britain wanted to change the agreed regime. Interpreting this last condition, it is concluded that according to International Law and UN resolutions there are reasons to maintain that Spain has already recovered its rights over Gibraltar, even though a British presence continues. This is due to the Gibraltar charter change that the UK carried out through the 2002 referendum and the 2006 Constitutional Order.