Un total de 120 estudiantes del primer curso del Grado de Arquitectura de la Universidad de Alicante (UA) expusieron el pasado viernes en el Paseo Marítimo Juan Aparicio y en las Piscinas Municipales las exposiciones pertenecientes a sus dos últimos talleres del curso Cocinando Torrevieja. En primer lugar, se realizó la presentación del taller “Tupi or not tupi, that is the architecture”, el lugar escogido fue el Paseo Marítimo Juan Aparicio desde las 11:00 a las 14:30 horas. Se trataba de nueve performances y en las que se podía unir el público asistente. A través de ella interpretaron los principios del movimiento; centrados, para esta ocasión, en el reconocimiento de las sujeciones que coartan la arquitectura, y confiados en que la interpretación de una deglución figurada, facilitará el alumbramiento de nuevas perspectivas, todo ello con unas puestas en escena llamativas y transgresoras que atrajo a cientos de curiosos que al final terminaron implicándose gustosamente en las mismas.
Segundo taller: Territorios Comestibles
El segundo taller tuvo lugar en las Piscinas Municipales de 15:00 a 16:30 horas, llamado «Territorios Comestibles». El objetivo principal de dicho taller era descubrir las redes económicas, sociales, medioambientales y culturales que están detrás de la gastronomía de la Vega Baja. El objetivo era cocinar dentro del mar sobre una serie de mesas instaladas a tal efecto, disponiendo los ingredientes sobre la mesa con el objetivo de dibujar un paisaje crítico y como conclusión del taller. A través de estas actividades, mostraron los resultados de su trabajo dentro del ciclo de actividades “Cocinando Torrevieja”, puesta en marcha por la Sede de la UA y la Concejalía de Educación del Ayuntamiento de Torrevieja junto con el Centro de Gastronomía del Mediterráneo de la UA, cuyo ciclo estuvo organizado por los profesores Enrique Nieto Fernández, María José Marcos y José Antonio Sánchez, del grado de Arquitectura de la Universidad de Alicante. En “Cocinando Torrevieja” los organizadores detallaron a través de unas llamativas y espectaculares puestas en escena los diferentes aspectos en los que el asunto de “la comida” se desarrolla en nuestra ciudad, caracterizado por un conjunto heterogéneo de historias, conflictos y realidades en el que compusieron nuevas cartografías gastronómicas desde la arquitectura y la ciudad. Aunque el tiempo no acompaño pues no apareció el sol y si que fue la lluvia la que en ocasiones hizo acto de presencia. La puesta en escena no dejó indiferentes a todo el público que se acercó a verla.
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