Esta semana han comenzado las obras de derribo del CEIP Inmaculada previa a la construcción del nuevo colegio. El inicio de los trabajos estaba previsto en el mes de abril, pero se vieron retrasados por las elecciones municipales al ser un colegio electoral. El centro, con una superficie total construida de 4.595 m2, cuenta con un presupuesto de 7,6 millones de euros y un plazo de ejecución de 15 meses. El nuevo colegio contará con 6 unidades de Infantil, 12 de Primaria, un comedor para 400 comensales en dos turnos y gimnasio. Los alumnos se encuentran realojados en módulos provisionales desde enero de 2023. El alcalde, Eduardo Dolón, señaló que «cumplimos así el compromiso que adquirimos con la comunidad educativa, y esperamos que se cumplan los plazos de ejecución de la obra para que los alumnos y profesores puedan volver pronto a su nuevo colegio».
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