Estos días atrás, la tónica de la noticia ha sido la nieve y esos paisajes de postal navideña. Comprendo que, para la gente que vive en esas zonas, sea un incordio, por el frío y los resbalones sobre las heladas aceras, pero, a nivel paisajístico, es una gozada. Mi familia y amigos se han dedicado a mandarme videos de su localidad, con los niños y perros jugando y tirándose bolas de nieve; también el álbum está repleto de imágenes. Quiero darles las gracias a todos, por esas cosas tan bonitas, tiernas y maravillosas, sobre todo las que hablan de Dios y su grandeza. Un capítulo aparte lo tengo reservado para el personal de Onda Cero, por su bondad y eficacia al realizar sus programas: tienen un buen maestro en Luis del Olmo. Aquí, en Torrevieja, la plantilla tiene unos buenos locutores, pero, en lo tocante al tema deportivo, destaca Tony, que es un fenómeno. Ese joven es algo fuera de serie, ya que inyecta optimismo y energía. Un buen gancho es la porra del futbol y el blog. ¡Cuando una persona triunfa en su vida privada, eso trasciende al público, y, sin querer, despierta el estusiasmo y lo bueno que se capta en las ondas! ¡T. y V., quiero agradeceros esos bonitos regalos que nos trajisteis desde Bulgaria; las fotos con la familia y los paisajes nevados, con los bosques llenos de lobos; las gallinas y los niños correteando; el amor entre vosotros, junto a padres y hermanos! ¡¡¡Es una suerte contar con gente tan amable!!! Aparte, quiero desearle a mi compañero y amigo de El Periódico, Fernando Guardiola, que su pregón sea tan comunicativo y elocuente como lo es él en persona. Le insto a que siga con esa labor humanitaria que tanto le dignifica. Hay poca gente como él y harían falta muchos Fernandos Guardiolas en esta vida. Un abrazo y ánimo.
Dejar una contestacion