Víctor Ferrández Esteve
Licenciado en CC Políticas y de Administración y miembro del Consejo Político de EUPV en Torrevieja
Tanto para los que defienden los tijeretazos como para algunos de los que los rechazan, las medidas adoptadas por el primer Consejo de Ministros del PP pueden parecer aceptables porque «no recaen sobre los más débiles», «son medidas solidarias» o «necesarias por el déficit del Estado del 8%», pero miremos la letra pequeña:
1. Primera mentira de Rajoy en campaña: «no subiré impuestos». Realidad: subida de impuestos, pero no a las grandes fortunas, sino a los «currantes», al IRPF. Como trabajador consciente de la necesidad de pagar impuestos para la búsqueda de la justicia social desde lo público, no tengo problema en pagar, pero… ¿y las SICAV? ¿Y las transacciones financieras especulativas? Estas dos son las principales causas de que ahora mismo sólo con los intereses de la deuda pública debamos 28 mil millones de euros tod@s l@s cuidadan@s, sólo en intereses. Pues bien, las SICAV tributan al 1% y las transacciones financieras especulativas no tributan nada. Impuestos sí, pero no siempre para los mismos. Una vez más, el PP nos demuestra su «NO!» a la progresividad de los impuestos, para que quien más tiene y lo usa para especular pague más.
2. Mirada al pasado nostálgico: Un intento desesperado por volver a la especulación con el ladrillo: otra vez se vuelve a la deducción en la declaración de la renta por la compra de vivienda nueva, buque insignia de la burbuja inmobiliaria. Esta medida puede aumentar algo la compra, es evidente, pero sólo de quien pueda pagar la vivienda sin hipoteca, es decir, si los bancos no dan créditos, los ciudadan@s con ingresos normales no podrán comprarse una vivienda y, por tanto, no podrán deducirse nada. Sólo quien tenga el dinero para comprarla «euro sobre euro» podrá beneficiarse doblemente: 1. De la deducción, 2. Comprar barato ahora y vender caro cuando la burbuja se vuelva a hinchar. Peor, hay más, suben el 50% del IBI, el IBI lo pagan todos los ciudadan@s que tengan una casa, ricos y pobres, es decir, que los pocos que consigan ahorrarse algo deduciendo acabarán devolviéndolo en forma de impuesto del IBI y los que ya tienen una casa y están hasta el cuello pagando la hipoteca, se verán aún más ahogados con este desmesurado aumento. ¿No hubiera sido más justo que el IBI de la primera vivienda (la familiar) bajara un 50%, el de la segunda vivienda (de vacaciones) se congelara y subir un 50% el IBI de la tercera y un 100% el de la cuarta y sucesivas viviendas (que son las de la especulación), cuando éstas estén vacías y no se alquilen o vendan? ¿Sabéis que se consigue con esto? 1. Que los dueños (bancos, inmobiliarias y particulares ricos) de más de dos viviendas que ahora están especulando esperando a que suban los precios las saquen al mercado de forma masiva, abaratando los precios y facilitando el acceso a la vivienda de quienes ahora no pueden permitírselo, 2. Que los cientos de miles de familias que sólo tienen una casa y lo pasan mal para pagar la hipoteca puedan respirar algo al ahorrase parte del IBI. Y, como puntilla final, congelan las ayudas existentes actualmente y eliminan totalmente las futuras al alquiler de jóvenes de menos de 30 años. En mi caso, iba a pedirla, pero me acaban de ahorrar un trámite burocrático, en fin: gracias PP. En definitiva, hoy el PP da un portazo definitivo a la cuestión del derecho a la vivienda.
3. Otra mentira electoral: «devolveré el poder adquisitivo a los pensionistas». ¿Y ahora qué? Sólo suben un 1% las pensiones cuando tienen ya una pérdida de poder adquisitivo acumulada en los dos últimos años, ayudada por la congelación técnica del Gobierno del PSOE, que multiplica por tres ese porcentaje. Pero lo más preocupante es la paralización indefinida del reconocimiento de nuevos dependientes, el mayor logro social de las últimas dos décadas paralizado en una sola semana de nuevo Gobierno. No quiero ni pensar cuánt@s ancian@s dependientes verán disminuidos su bienestar y aumentado su sufrimiento. Deleznable.
4. Una línea sobre funcionarios: cobrarán menos, trabajarán más y no se sustituyen los que se retiren; adiós definitivo a la creencia popular de que son unos privilegiados. Y yo apoyaré todas sus movilizaciones.
Y esto sólo son cuatro de los muchos ámbitos donde se observa la letra pequeña detrás del «talante social» de la tijera del nuevo Gobierno del PP, porque, como la propia vicepresidenta del Gobierno Sáenz de Santamaría reconoce: «es sólo es el inicio del inicio». Pues bien, en estos cuatro años, el pueblo tiene dos vías: tragar y tragar o luchar por sus derechos. Yo elijo luchar, ¿y tú?
Si IU no hubiera apoyado a ZP en el Parlamento, podríais hablar. Así, a callar.
a callar? esa es la democracia para vosotros: la censura. Pues, aguantarse que nunca nos callarán
por cierto, repasa las hemerotecas que te hace falta: el PP ha llegado a más acuerdos con ZP que IU en la ultima legislatura.
Sí, pero la política zapatera de gasto la habeis apoyado vosotros