Esto no pinta muy bien. En esta crisis, el ciudadano no está hecho para soportar un hachazo diario por parte del gobierno: recortes en Sanidad y Educación, bajada de salarios, subida del IVA, el paro por las nubes, reforma laboral, rescate, banco malo, banco bueno… pero nadie pisa el banquillo del Juzgado. Sabemos que la crisis tiene su origen bancario; el dinero del rescate que ha mendigado Rajoy es para salvar a la Banca, aunque luego -como siempre-, lo devolvamos con creces todos los demás. ¿Por qué ese afán del gobierno en salvar a las entidades financieras? ¿Por qué no pone el mismo empeño en salvar a las personas inocentes de esta crisis? Porque a los políticos las personas les importamos un bledo. Esta es mi conclusión y la razonaré: todo el que quiera llegar a la Moncloa necesita financiación; las campañas electorales son caras y los más «generosos benefactores» siempre son los bancos. Éstos apuestan siempre al rojo y al negro cubriendo todas las apuestas; por lo tanto, se aseguran que el presidente siempre sea un «amigo» que les devolverá el «favor». A esto se le llama financiación ilegal de las campañas electorales, viene sucediendo desde que el mundo es mundo pero nadie quiere abrir ese melón, porque todos saldrían perjudicados. Leo en los periódicos lo siguiente: «Elecciones Vascas: las ayudas a partidos con escaños suben un 7% y superarán los 5 millones». Muy bien hombre… mientras todos se ajustan el cinturón, éstos a cobrar más por cada voto recibido. Menos bromas… que la gente está llegando a un límite y a lo mejor deciden no votar a nadie y sacar al unísono todo su dinero de los bancos. Entonces sí que nos vamos a reír todos.
Rafa Zamora Sancho
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