Descontento general en la Residencia La Inmaculada

AL SEÑOR ALCALDE DE TORREVIEJA, AYUNTAMIENTO PLENO Y MIEMBROS DEL PATRONATO DEL SANTO HOSPITAL RESIDENCIA INMACULADA CONCEPCIÓN.

Quienes suscribimos este escrito somos, todos, residentes mayores que hemos pasado, y continuamos haciéndolo, parte de nuestra vida en la Residencia Inmaculada Concepción de Torrevieja.
Por eso nos sentimos identificados tanto con la ciudad como con la institución y el personal que nos presta su ayuda y dedicación diaria.
Hemos visto con preocupación la evolución que en fechas recientes ha tenido la prestación asistencial que recibimos. Dejamos claro nuestro agradecimiento a todo el personal y a las Hermanas Carmelitas que se vuelcan en atenciones con todos nosotros, en una situación tan difícil como la vejez o la discapacidad; pero nos inquieta que podamos vernos afectados por las dificultades económicas que atravesamos, especialmente en un futuro. Particularmente estamos preocupados por la elevación de tarifas que se pretende implantar en la Residencia con riesgo de que dejen de primar valores humanos y religiosos por razones ajenas al fin fundacional que sustenta nuestra convivencia.
Todos los que estamos en la Residencia lo hicimos en la confianza y convicción de que nuestra asistencia continuaría hasta nuestros últimos días, abonando los gastos que ello comporta con tarifas razonables y ajustadas a la elevación gradual y paulatina de los costes por los servicios que se vienen prestando y los objetivos que se establezcan. Gran parte de nuestras pensiones e ingresos, la mayor parte en la mayoría de los casos, la dedicamos a abonar los precios establecidos. Por ello no nos parece razonable que el precio inicialmente pactado se eleve desproporcionadamente por encima del incremento anual del coste de vida. Nuestra convicción inicial resulta contrariada por la elevación de precios que se pretende instaurar. En algunos casos esta elevación supera el setenta y cinco por ciento del precio que se abonaba el año anterior. Esto altera la confianza que depositamos inicialmente y representa para algunos de los afectados la entrega de todos los ingresos mensuales de que disponen y más. De modo que se nos coloca en la situación difícil de abandonar la Residencia o acudir a familiares para que nos ayuden si optamos por permanecer; pocas o muy pocas personas podrán hacer frente por sí mismas a esta nueva situación si se establece la elevación prevista. Si esto se consuma se perjudicaría la finalidad de la fundación. Esperamos que esto no ocurra y por ello les solicitamos su ayuda, apoyo y sensibilidad ante nuestra situación, expresando nuestra disconformidad con las nuevas tarifas.
Asimismo sugerimos que se acuda a la Generalitat Valenciana para que ésta se implique en la situación, dado que en la Residencia existen personas con reconocida discapacidad, incluso por resolución administrativa de la propia comunidad autónoma, que no reciben ayuda alguna.
Las firmas que suscriben este escrito expresan nuestra voluntad y petición.

En Torrevieja, a junio de 2013