¿Montan las terrazas o no?

Joaquín Guillamó Alarcón
Secretario Comarcal de Turismo PSPV-PSOE Vega Baja

El pasado 24 de abril fuimos convocados por Alcaldía de forma extraordinaria y de urgencia a las mesas municipales de Hostelería y Comercio con el fin de consensuar y dar el visto bueno, más lo segundo que lo primero, a la nueva ordenanza de ocupación de la vía pública, con la promesa de agilizar los trámites pertinentes para que estuviera lista al inicio de la temporada de verano.
A día de hoy sin embargo y casi mes y medio después, ni siquiera se ha llevado al Pleno municipal, por lo cual se deduce que muchos negocios van a quedar desamparados ante una situación de la que es responsable único el equipo de gobierno local y su habitual incapacidad para hacer las cosas en tiempo.
La ordenanza de 2003 impide poner cualquier tipo de paraviento, toldo o estructura fija en la calle sin autorización aunque se abonen las tasas. Sin embargo, todo el mundo ha hecho la vista gorda hasta ahora por interés común y, a la espera que se actualizara dicha ordenanza, los hosteleros y comerciantes han puesto sus terrazas, la policía no ha hecho nada por impedirlo y el Ayuntamiento ha cobrado las tasas correspondientes. Ahora sin embargo, como consecuencia del enfrentamiento existente entre policías y equipo de Gobierno, la policía ha empezado a multar haciendo cumplir la ordenanza en vigor y los empresarios del sector se encuentran que están pagando tasas y siendo multados al mismo tiempo, y, para colmo, no quieren arriesgarse a poner sus terrazas por miedo a más multas cuando faltan días para que empiece la temporada alta turística, la que les permite salvar el año en una situación tan complicada como la actual.
El resultado de todo esto es que el equipo de Gobierno local, por su ineficacia y rencillas internas con parte de sus empleados, está poniendo en peligro docenas de negocios y centenares de empleos de dos de los sectores básicos de la economía local. Es la última prueba de que esta ciudad le viene grande a Eduardo Dolón y su equipo de Gobierno, aunque siempre podrán apelar a que la culpa la tiene algún técnico y seguir disimulando.