No puedo pasar por estas paginas sin una obligada mención, aunque sea sucinta, sobre el magnífico y difícilmente superable LV Certamen de Habaneras y Polifonía. El «Certamen del trabajo», tal y como lo ha descrito Francisco Grau Vegara, ha resultado ser uno de los de mayor calidad de los últimos años. Felicitamos encarecidamente el trabajo de los solistas y las corales locales, especialmente lo haré con mayor agrado a la Coral Manuel Barberá (el coro de mis amores) por su soberbia selección e interpretación de obras, tanto en habaneras como en polifonía, aunque en nada quiero desmerecer al resto, que igualmente «rayaron» a gran altura. Desde aquellos tiempos, como dice mi hijo (¡joer!, cuando lo dice me siento una momia o algo), en los que uno tarareaba en la «agrunsaera» colgada del pino, en los días de campo en La Mata, viendo afinar las voces a base de «palomicas» y entre viandas de pollo, conejo, y tortilla, hasta hoy, no han pasado muchos años (de ahí que no comparta las simpáticas ironías de mi hijo en relación con los «tiempos»); pero reconozco gratamente el alto grado de profesionalidad y el buen trabajo de todos los miembros del Patronato Municipal de Habaneras, habiendo alcanzado un producto que representa a Torrevieja en todo el planeta y del que debemos todos sentirnos muy orgullosos (a diferencia del «puto Premio de Novela» que, aparte de no servir «pá na», es clasista, ¡«lexes»!, os vais de cena los de siempre y lo pagamos todos, costearlo de vuestro bolsillo, o invitarnos o todos -aunque yo no iría ni cobrando-). Lo único negativo ha sido el infortunado accidente de Dani de TVT, al que deseo de todo corazón su TOTAL restablecimiento, ¡ÁNIMO DANI! Puestos a felicitar, lo de la UMT «no tiene nombre». Por Dios, qué gente, son increíbles, son buenísimos, y ya sabemos que ese segundo puesto «del mundo mundial» no es porque sí. En la vida, el talento sin trabajo funciona, aunque estos chicos tienen de sobra de ambos. ¡¡¡FELICIDADES UMT!!!. Y ya para cerrar este apartado de congratulaciones, el pasado día 1 de agosto, el Orfeón Municipal y Los Salerosos ofrecieron un fantástico concierto. Pude escuchar el «Carmina Burana» de Carl Orff, cosa que les agradezco en grado sumo. ¡«Coño»! Me he emocionado con los actos musicales, no en vano uno es «fundamentalista»; pero de la música y de la transparencia en todo; por eso tendré que aparcar mi «humilde» (¡juass!) opinión sobre el «dudoso honor» de ser la gestión municipal más opaca de España. Algo esconden, y no son los «progres» de «Matrix» (que no de matriz) precisamente.
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