Una boda, un funeral y varios contratos irregulares

Todo parecía ir sobre ruedas en el inicio de este nuevo mandato municipal: el sábado 13 de junio se constituyó la nueva Corporación con un breve insulto pepero hacia el alcalde José Manuel Dolón; el martes 16 de junio, el alcalde, mediante decreto, resuelve otorgar las concejalías a los doce concejales, aunque previamente ya había configurado la llamada Junta de Gobierno con sus siete tenientes de alcalde. Todo parecía que iba viento en popa y a toda vela, incluso realizando la primera boda de su flamante inicio de mandato, cuando se encuentra con tres pasteles: uno, que debido a un tropezón cualquiera se lesiona la mano derecha, con fisura incluída, con lo que va a posibilitar que los decretos de alcaldía, de momento, deban ser ejecutados con la mano izquierda, aunque está acostumbrado a ir por la izquierda sin problema alguno; dos, que de la boda hemos pasado en un pis-pas al funeral del Partido Popular, aunque dicho para bien de la más amplia oposición, Luis María Pizana ya se ha convertido, legítimamente, en el primer espada crítico con el alcalde actual, repitámoslo, José Manuel Dolón; y tres, que la mayor parte del programa cultural del verano, es decir, Osborne y demás, tienen sus contratos reparos por parte de Intervención, es decir, que está de forma irregular, por lo tanto, o los paraliza con un decreto con su mano izquierda, o levanta el reparo con su superior criterio y tendremos actuaciones veraniegas, eso sí un poco fuera de ley. En fin, cosas que pasan a diario en la Casa Consistorial, y que forman parte de la grasa del engranaje municipal.
José Manuel Dolón, que es verdad que es un corredor de fondo, como bien apuntó el ínclito escribidor Manuel Pamies en su último artículo, tiene por delante una ardua tarea, con una oposición mayoritaria enfrente que se va a cagar por una pata, y con unos problemas serios como el contrato de las basuras, el permanente conflicto en el cuerpo de la Policía Municipal o darle la vuelta como un calcetín a esta ciudad con encefalograma plano. En fin, José Manuel, mucha suerte, que Dios te bendiga, B. Bretch también, entra a matar al toro y… al loro.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


*