Manuel Bueno
Director de Colesterol Teatro
Rajoy acaba de meternos un gol. A tós. Y, como el hombre tiene un tractor, va a dejar sembrao el suelo español de más de lo suyo: recortes, corrupción, mentiras y cintas de vídeo (audio). Porque de sexo (plagiando el título original de la peli), me parece que, hasta los sex-shop, van a tener que cerrar por falta de clientes. Y esto es malo: porque los usuarios de tiendas de juguetes para adultos, suelen echar imaginación (que falta hace en este país) al asunto. ¿Qué asunto? Pues al que, Mariano, ha empujado ya, con su tractor, al abismo de la negación Podemita, el abstencionismo Psoecrático o a la ignorancia de Aitor. Sí, Aitor, el vasco del PNV que le pide «más grano y menos leña», ése. Pobre PNV, el partido más fálico que sigla alguna quisiera para sí, y, sin embargo, el que representa a la región dónde, estadísticamente, menos se folla en la península ibérica. «Cuadrilla», sí, pero de follar ni hablamos. L@svasc@s, solo para tomar xiquitos y cantar de madrugada sus raíces sumergidas en el alcohol de un xacolí, de investidura fallida y algo rezongón.
Rufián, Gabriel, es un bárbaro. Un jinete de la estepa de Mongolia, renacido y amamantado con la «mala leche» del bajo Llobregat y la poeticultura del actor charnego y socarrón. Rufián, es un rufián, sí. Bendito sea, por todos los astros de la incorrección universal y por su tiro certero y atomizador, en el pecho, de todos los traidores al César. Luena, no, que es un transtornao y un vendedor de castañas reciclado en pelotari sociolómano.
Antonio!! (que no Marco Antonio). Hernando!!: eres como un agujero de gusano. Pero sin la profundidad, el enigma y magnetismo de la Física y la Ética juntas. Eres un anélido «castrato». Sí, ese asqueroso y baboso bicho que los cadáveres políticos supuran por todas sus cavidades, y que, después, perdido y avergonzado, se retuerce y consume en el vacío que le procura el resto de la manada indiferente. Antonio Hernando, gusano moribundo, atravesado por el anzuelo mixto de ese pescador asturiano sociópata y ramplón, y el de la Peggy-Su andaluza y mostrenca: sumérgete en la piscina de mierda que, la depuradora justiciera de Lucifer tiene en Torrevieja, y desaparece, para siempre, por el desagüe del inodoro de Ferraz.
Peter Pan con chorizo Sánchez: estás acabado. Ni listo, ni guapo (depredadores estéticos: su cara está más picada -de viruela- que las pelotas de Bela elevándose en un partido wpt de su cancha padelera en Pehuajó). Es solo un cromo. Al que hay que despegar de ese album anacrónico, al que pertenece Felipe y su cosecha de mamones. ¿Miedo, tontuna, incapacidad, disfunción eréctil? Pues, al baúl. Uno más. Uno menos. ¿Ahora te acuerdas de Podemos?. Al cajón. Ni coche, ni tourné, ni web. Al banquillo. A la mierda, también.
Albert!!. Ni Einstein, ni Phelps. Tú, ya, ni desnudo, seduces a Rosa Díez «Magenta», a solas, en un callejón oscuro de un barrio de Hospitalet. Rivera, primo de: el yugo y las flechas, para tus bueyes mansos del Penedés (otra sexomanía mía) y para el amor Mariano del Opus Dei, que profesas en los altos confesionarios del Pp. Cabronazi, no. Lo siguiente te cuadra mejor. Eres más empalagoso que el día de la madre en tiempos de Franco. Y mucho más que Pablo Iglesias besando a Errejón, en la mismísima cara atónita de Ana Pastor (la Sexta tv). Anita, entonces, cambió el gesto y pensó: Hecho: el trío, con los Tom y Jerry de Podemos, pactado con un beso. Ahora, somos tres. Ferreras: tocan cuernos. Échale güevos, y narra en directo la bacanal podemita con Pastor. Lo mismo te atizan un Ondas. Y ya puestos, te lo aplicas a tu escaso tupé. Yo que tú, llamaría a Donald Trump. Ese si que sabe de tríos …… y de extensiones (de todo tipo).
«Rajoy acaba de meternos un gol. A tós»
No, Manolito, a los 8 millones (OCHO !!) de votantes del PP no nos ha metido ningún gol, nos ha parado un penalty. Ya estaban los separatistas, pablemitas y sociolitos relamiéndose y frotándose las manos…, hasta que llegó Felipe.
Ajo y agua,