» Luz verde a la rebaja del IBI en un 4% en 2017 y en un 7,5% en 2018
El PP, Ciudadanos (C’s) y Sueña Torrevieja tumbaron en un Pleno extraordinario la propuesta técnica para modificar el periodo de cobro de la tasa de ocupación de vía pública, pese a la ausencia de dos concejales del PP y otro de Sueña Torrevieja. Los portavoces del PP y C’s, Eduardo Dolón y Pilar Gómez Magán, solicitaron que se dejara sobre la mesa para estudiar las reivindicaciones de los feriantes instalados en el puerto, que reclaman que se adapte la ordenanza a su presencia durante cuatro meses en este recinto y tener las mismas bonificaciones de los hosteleros con terrazas, criterio que compartió el concejal de Sueña Torrevieja, Pablo Samper. La votación se desarrolló con cierta confusión, ya que en un primer momento la secretaria indicó que la propuesta se había rechazado al contabilizar por error el voto de Samper como favorable cuando era de abstención, el cual dejó en minoría al gobierno local, que contó con 10 votos frente a los 11 votos de PP y C’s. El concejal de Hacienda, José Hurtado, advirtió que la no aprobación implica que ya no pueda aplicarse para 2017 al no haber tiempo material.
Rebaja del IBI
Asimismo, el Pleno dio luz verde a la modificación de la ordenanza fiscal reguladora del IBI, con la reducción del tipo impositivo para los dos próximos años, en un 4% en 2017 y en un 7,5% en 2018, así como bonificaciones para familias numerosas y por sistemas de aprovechamiento solar. La modificación de la ordenanza se aprobará de forma definitiva y automáticamente una vez haya concluido el periodo de exposición pública en el caso de que no se presenten reclamaciones. Previamente, se desestimó el acuerdo que se tomó en consideración hace un año relativo a la propuesta del PP para rebajar el IBI un 10%. Por otro lado, se acordó dejar sin efecto el plan de ajuste a consecuencia de la amortización de dos préstamos con entidades financieras, uno de ellos de casi 18 millones de euros para el plan de pago a proveedores. Hurtado explicó que el plan de ajuste obligaba a reducir el gasto en el contrato de las basuras en 2,5 millones de euros y también el contrato de limpieza de edificios municipales y colegios.
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