Engañado, estafado, cabreado, con el sentimiento de «cartera robada en toda tu cara»; así se me dirigió en la Calle Clavel, un votante habitual del PP en Torrevieja; padre sufridor del gran problema que es la drogadicción en nuestra sociedad moderna. Jamás pensó este torrevejense que cambiar su VOTO a Ciudadanos en las Elecciones Municipales de Mayo del 2015, no por castigar a Eduardo, sino por reprochar a la marca «Popular», sería imprescindible y usado en el Ayuntamiento de Torrevieja para que José Manuel Dolón despreciara la simple posibilidad de pedir una subvención noble y luchar contra la cruel lacra que suponen las enfermedades vinculadas a la drogadicción. El peor gobierno municipal de Torrevieja en toda su historia, compuesto por acción o por omisión por seis formaciones políticas, con los votos de Ciudadanos, perdió en 2016 esta ayuda humanitaria básica; en el año 2017 renunció a seguir tramitando esta misma subvención; en este año 2018, el «Servicio de Unidad de Prevención Comunitaria de Conductas Adictivas», que así se llama este equipo municipal de lucha y atención contra las drogas, ha sido ninguneado: directamente no se ha pedido la ayuda económica que garantiza su actividad para disuadir a los más jóvenes de Torrevieja, y evitar que caigan en ese veneno mortal que es la droga y el delincuente mundo que le rodea. Este torrevejense votará a Eduardo Dolón en mayo de 2019. El apoyo hasta la extenuación de Albert Rivera en Torrevieja a un acuerdo anti Eduardo Dolón, dándole cuatro años la Alcaldía al comunismo podemita, y aprobándole todos los acuerdos básicos para mantener a Torrevieja totalmente paralizada en asuntos clave, ha terminado por convencer a este honrado vecino del Acequión. Que Ciudadanos en Torrevieja apoye sin fisuras al Gobierno municipal que ha RECHAZADO POR INUTILIDAD pedir ayudas para la lucha contra las drogas, y no sea capaz ni de decir «esta boca es mía», ha colmado el vaso de la paciencia de quien en su casa ha visto los estragos que causa esta enfermedad, en un joven que tenía todo el futuro por delante. Lo escuché; le di ánimos; y me planteó una última cuestión: «Joaquín, tenlo claro. Cualquier voto que no vaya a Eduardo servirá para repetir el desastre que tenemos hoy en Torrevieja». Si me engañas una vez, la culpa es tuya; la segunda vez, será mía. En el Dulsísimo nombre.
El discurso del miedo, una vez más. Nada nuevo bajo el sol. No cuela Sr. Albaladejo. No cuela su discurso de tildar al actual gobierno de «podemita y nacionalista». A las personas mayores quizás las convenza; a los demás no. Ciudadanos les está adelantando sin frenos y muestra de su nerviosismo son los constantes ataques a esta formación. Dedíquense a hacer una política más constructiva y menos a esta política rastrera.
Pedro cuando dices: «A las personas mayores quizás las convenza, a los demás no», tú mismo te descalificas.
Pedro: Con tu desafortunada alusión a las personas mayores, tú mismo te estás descalificando.
Pedro: Tu comentario no hay por donde cogerlo, y además, en tu alusión a las personas mayores te descalificas tú solo.