La noticia de prensa nos dice que el Presidente de la Diputación y del PP de Alicante, sr. Ripoll, retiró su confianza a Sebastian Fernández por haber dado su apoyo al sr. Fenoll en las elecciones provinciales. El sr. Fernández, al parecer, ocupaba el puesto de mayor responsabilidad en el Patronato Provincial de Turismo, y con éste se descuelgan otros 5 cargos de su confianza; hasta de chófer y coche disponía este diputado provincial. Vaya lujo de puesto. El repuesto para este puesto parece ser que es para otro diputado provincial, ahora afín a Ripoll y desafecto en este momento a su alcalde, el sr. Soler, teniente de alcalde de Torrevieja y el segundo en el organigrama del PP torrevejense. El alcalde ya ha dicho por activa y por pasiva que sólo se presentará en caso de necesidad y sobre todo para parar a aquellos «arribistas». Lo que se desprende de estas declaraciones es que el sucesor o sucesores postulados por ellos mismos no le valen, y tendrá que ser alguien de su confianza para que no sea arribista. Ya se sabe, en el PP, más que la democracia, lo que existe es la «dedocracia» (vemos el caso de Aznar y Rajoy o el de la presidencia de Cataluña, que no aceptaban a la sra. Nebreda). Contado así, parece un culebrón político, donde lo único que queda por ver es: ¿Quiénes serán los repuestos a las 5 personas destituidas? ¿Cuándo destituirá el alcalde de Torrevieja al sr. Soler?
Joaquín Garrido Mena
Militante del PSOE de Torrevieja
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