Incomprensión…

Si observamos una semilla de trigo, por ejemplo, cuando ésta es plantada en la tierra muere para dar paso a la espiga portadora de vida y que posteriormente nos dará el fruto que de ella esperamos, pero si, cuando la espiga comienza a brotar y está viva cogemos unas tijeras y la cortamos, ésta sí morirá definitivamente antes de ser y habremos interrumpido su vida dejándonos sin su fruto.
Cuando un espermatozoide y un óvulo fecundan, éstos mueren para dar paso a una vida incipiente y, al igual que la semilla, es un ser vivo humano que comienza a crecer, tiene vida propia, la cual, si la cortamos con las tijeras, estamos quitándosela a un ser que no ha visto la luz.
Por otro lado, se está potenciando a la ciencia en el estudio de las células madre obtenidas de los embriones nacientes para conseguir la salvación de los seres humanos ante las crueles enfermedades que afectan hoy en día a la sociedad, así como la creación de medios para defender los derechos a la vida del ser humano.
También conocemos la dureza con la que los jueces castigan a aquellos padres que maltratan a sus bebés y comenten atrocidades con ellos, como quemados de cigarrillos, palizas, drogas, etc.
¿Dónde encuentro la incomprensión? Pues, a la vista de lo expuesto anteriormente, no entiendo cómo no solo está autorizada legalmente la interrupción de una vida (aborto), sino que ahora se pretende autorizar que dicha vida sea arrebatada cuando es mayor, o sea, a los dos meses y medio de gestación, cuando su corazoncito ya se escucha en el seno de la madre. ¿Cómo se puede ser tan cruel legalmente?
Hay quien lo justifica diciendo que es la sociedad quien lo demanda y hay que ir de acuerdo con la misma. La sociedad lo demanda porque se han creado los medios para tal crueldad. ¿Por qué no se les pregunta a muchísimas mujeres que están arrepentidas de haber hecho tal cosa y que actualmente están en tratamiento psicológico? ¿Por qué no le preguntan a las numerosas mujeres que se acercan a los confesionarios de las iglesias solicitando perdón por lo que han hecho?  Porque se busca un progresismo inhumano que va en contra de la vida y a favor de la muerte. Hay que satisfacer el egoísmo de algunas personas, aunque por ello tengan que pagar vidas inocentes, hay que crear una vida sin espiritualidad moral, débil y esclava de los que facilitan los medios para satisfacer el egocentrismo humano. Una vida sin Dios, pues Éste no nos hace falta, nos creemos capaces de ser más que Él. Ya hubo otras civilizaciones que pensaron lo mismo y sucumbieron y desaparecieron ante esa debilidad.
Estamos a la puerta de la Semana Santa, tiempo de reflexión y reconciliación con uno mismo y con Él, Aquél que dio su vida para justificarnos y salvarnos a todos, pues Él mismo lo dice: «Quien cree en Mí, tendrá vida eterna». La autentica libertad está en el perdón y en el amor entre los seres humanos y no en el odio, el egoísmo y el rencor. «No es un Dios de muertos, sino de vivos, porque para Él todos viven» (Luc. 20,38).

Carlos García