Ya me han llegado noticias de vuestro nuevo éxito en el teatro, el pasado 27/06/09, con una conocida obra, a la que habéis dado, como en las fachadas andaluzas, «una manita de cal» y os ha salido bordada. Y… ¿qué se puede esperar de unos artistas tan maravillosos y con tantas tablas, que han pateado medio mundo llevando el nombre de España como una bandera desplegada al viento? Sabéis que, para no ser pesada, me abstengo de escribir más a menudo sobre vosotros, pero mi corazón siempre os tiene presentes. Lamento no haber asistido al teatro por problemas ajenos a mi voluntad. No se si sabréis que, en días pasados, fuimos todos los componentes de Torreguía y El Periódico a pasar el día a la isla de Tabarca, invitados por la «gran jefa». Pasé unas horas estupendas y luego, un paseo. Fue un día inolvidable, en el que conocimos a los nuevos «fichajes colaboradores», y ellos a los carrocillas de turno.
Quisiera hacer una mención especial a la desaparición de Michael Jackson, a su extraña muerte. Todavía me parece estar viéndolos, de pequeños, a los cinco hermanos «Jackson five», tan preciosos, con esos ricitos y su forma de bailar y moverse en el escenario, que parecían pelotas de goma. ¡Verdaderamente encantadores!
El arte tiene tantas vertientes como un río que va a parar a la mar, pero ese «gusanillo» artístico no todo el mundo lo vive con el mismo entusiasmo que vosotros, pues se os ve en vuestro elemento, gozando y haciendo reír a vuestro público fiel, que, al fin y al cabo, es el que tiene la última palabra ¡¡¡Enhorabuena una vez más, Colesterol Teatro!!!
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