Domingo Pérez Gutiérrez
CEL PSOE Torrevieja
Qué razón tiene mi admirado autor cuando advierte que, si analizamos toda la información que recibimos durante la vigilia, a la hora del descanso nuestro sueño será totalmente reparador, ya que nuestro cerebro no tendrá que trabajar ordenando ese «barullo» que nos llega desde el exterior.
Nuestro alcalde, Pedro Ángel Hernández Mateo, debe de tener conocimiento de esta, digamos, técnica, pues debe de haber sido tras una noche absolutamente plácida y reparadora a nivel cerebral cuando, con la mente perfectamente afinada, «resolvió» el ya viejo problema de Torrevieja con las aguas pluviales. Y tuvo que ser una noche absolutamente brillante (estoy hablando del cerebro), ya que, a la vez, dio con el culpable causante de las terribles noches de agobio por las inundaciones de calles, bajos, y garajes, que también desde hace años sufrimos los torrevejenses.
Cuando dio a conocer públicamente las soluciones al problema, el alcalde, como era de esperar, nombró a los culpables del desaguisado pluvial y aseguró que tomaría las medidas oportunas para acotar sus desmanes, a la vez que anunció un plan, cómo no, millonario, para resolver de una vez por todas el problema.
Tengo un amigo personal que vive donde la Rambla de J. Mateo entronca con el paseo. Y, estando yo explicándole las declaraciones del alcalde tras esa, supuesta por mí, magnífica y productiva noche, vi cómo, cambiando de color, comenzó a enumerarme los muchos sitios que en Torrevieja sufren, como él, por la falta de una infraestructura tan necesaria, así como por haber permitido construcciones sin prever este problema, recordándome, además, que este mismo alcalde -él lo recuerda porque es damnificado- ya había prometido solucionarlo hace más de diez años y nada se hizo. También mi atribulado amigo me hacia notar que lo que el alcalde decía que era el problema, la desalinizadora, estaba a kilómetros de distancia de los sitios que el me citaba.
Claramente, mi interlocutor no recuerda la cualidad de la mente que ya intenté explicar en otra ocasión, y que consiste básicamente en olvidar lo que no nos interesa. Este recurso ha sido el empleado, no tengo dudas, por Hernández Mateo para culpar, una vez más, al Gobierno de España y, por ende, a J.L. Rodríguez Zapatero de todo lo malo que ocurre en Torrevieja. Sin usar esa cualidad de la mente, la memoria selectiva, seria difícil entender cómo se pueden hacer declaraciones de este tipo. Muy difícil.
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