Enseñanza y educación para la ciudadanía

Alexis Carrel (1873-1944)

Tras más de cincuenta años de enseñanza. uno llega a la conclusión de que la mejor manera de educar a otros es ser buen discípulo de uno mismo y ya Séneca advertía de que, si es verdad que aprendemos a través de nuestra propia vida, el sistema más rápido será el del ejemplo más bien que el de la instrucción.
Premio Nobel de Medicina en 1912, el polifacético galo Alexis Carrel fue una eminencia en muchas materias tales como la medicina y la biología si bien su pensamiento resultara a veces un tanto polémico. Con su obra “La Incógnita del Hombre” logró ser un catalizador de los valores éticos como ciencia constatable: “Conocemos mejor la materia inerte que las posibilidades de nuestra mente”, si bien a veces sus conclusiones resultaran conflictivas pues, según él se puede llegar a la experimentación de las normas morales que superarían, sin oponerse, a los valores competitivos aunque con frecuencia estorben al hacer decisiones concretas de menor rendimiento a corto plazo.
Si tomamos como punto de referencia la evolución más reciente de los juegos menos competitivos pues sigue paralela a la de los temas morales sin duda porque se aprende jugando, está claro que se ha llevado a cabo en detrimento de los primeros pues basta con analizar el estado actual de algunos como las canicas, la comba o el parchís por mencionar sólo un puñado. Alexis Carrel anotó este involucionismo de valores ya a mediados del siglo pasado, previendo lo que ahora lamentamos, y quiero citar por entero uno de sus textos más famosos ya que no hay desperdicio de términos: “La educación que se da hoy en día en los colegios se limita al cultivo de la memoria, de los músculos y a ciertas reglas de urbanidad. De equilibrio mental, estabilidad nerviosa, juicio recto, valor humano, audacia, resistencia al mal, tacto, forma de tratar al prójimo y manera de hacer el mayor bien de los contratiempos, cero”. Y mantenía que las mujeres suelen ser más sensibles en notarlo: “Su papel en el progreso de la civilización es mucho más importante que el de los hombres” escribió sin paliativos para una sociedad en que se desarrolla el síndrome de inferioridad o machismo chovinista que está haciendo ahora tantos estragos.
El aprendizaje no puede llevarse a cabo al por mayor, es siempre individual de persona a persona, diría Carrel a quien dedicamos estos momentos de reflexión en unas épocas en que los principios éticos apenas si cuentan a juzgar por los eventos que llenan los medios de comunicación, si bien parece claro que el ser humano tiene la mente en dirección al bien hasta que se la retuerzan para lo peor, siendo éste uno de los problemas de nuestro tiempo.

HECHOS Y DICHOS
No hay ni malas hierbas ni malos seres humanos, aunque abunden sus inexpertos cultivadores. Victor Hugo

REFRÁN INGLÉS
“Like(como) father like(así) son”: (equivale a : “De tal palo tal astilla”)

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