Resulta tan rancio y retrógrado pensar que la crítica es destructiva e inútil, que sólo sirve para atacar, cuando es todo lo contrario. Claro que depende de quién la haga. Sólo algunos pueden criticar, insultar y ofender la inteligencia de cualquiera con dos dedos de información en la mente. También pueden mentir, apañar plenos, «cuñear», apadrinar a adultos «trajaeaos» en el nombre de Torrevieja; porque Torrevieja sólo son ellos y los que ellos eligen merecedores de tal asignación «socio-geográfica». Algunos políticos, para intentar comernos la «olla», utilizan a los «mamporreros mediáticos» (que no es lo mismo que periodista, esto último tiene mucha más importancia, sobre todo si tienen la carrera de periodismo). Si la manipulación de la verdad política es «chunga», la intoxicación informativa es todavía peor, venga de donde venga. Rendir servidumbre, prostituyendo políticamente lo que debería ser la narración objetiva de algún hecho «noticiable» (por ejemplo, la atribución de méritos por el establecimiento de Microsoft), no ayuda a informar al ciudadano; dándole el servicio de proporcionarle datos objetivos y así forje su propia opinión. Esa gente, que se supone informa, sólo manipula. Lo peor es que lo veo cada día con más descaro este asunto. Esto ocurre desde que se inventó la imprenta, bueno, ya antes, cada «versador» contaba la historia a su buen glosar. Ahora menos mal que tenemos Internet y la comunicación ha mejorado su diversidad y su fundamento, que ha pasado de ser «toma, cómete esta mierda, que yo soy el que emite y tu el receptor», a un tipo de comunicación más participativa, enriquecedora, más plural y, lo que es más interesante, puedes contrastar una misma información, forjarte tu opinión al respecto, ver quién miente, quién no, quién te toma por imbécil y quién no. No encuentro calificativo (bueno, sí lo encuentro, pero es muy fuerte y no lo escribo) para justificar que unos políticos inviertan nuestro dinero, el que viene del bolsillo de mentes con diversas ideologías, en costear empresas o individuos del sector de la comunicación, con la intención de obtener rendimiento electoral para sí mismos. Felicitaciones a los creadores, programadores y diseñadores del sistema informático Florence, auténticos artífices del «habemus Microsoft».
El «Habemus Microsoft» no tiene que ser tan malo, si parte de la investigación científica se fija en Torrevieja para llevar a cabo sus proyectos..Ahora bien, habría que pensar qué demonios necesita la ciudad para poder desarrollarse de forma cualitativa, además de con este proyecto…Con respecto a lo de los medios, es cierto, aunque el periodista indicidualmente, tiene muy claro lo que piensa….El periodista tiene muy claro que el que le lee no es para nada tonto, aunque a veces, se autocensura (Qué mal suena) y eso que, cuando la imprenta, mataban a los que ejercían la libertad del periodismo, por ejemplo, en Venecia, donde surgieron y donde se dejaron la piel cuando pretendían hacer crónicas de todo el gran negocio que hacían los mercaderes llegados de otros puntos….