Reflexiones de un contribuyente torrevejense nº469

Estimados contribuyentes torrevejenses, al ver y oír la desvergüenza política que campa a sus anchas en nuestra ciudad, yo desde luego no salgo de mi asombro.
Escuchar y ver en la TV los mensajes del Partido Popular para salir de la crisis que ellos han provocado, abogando por la austeridad, el apriete del cinturón de los trabajadores y las capas populares es una falacia en práctica en el Ayuntamiento de Torrevieja, gobernando por el Partido Popular, pues, por lo que se ve, estos «servidores públicos de pacotilla» lo único que hacen es gastar dinero público -que no de su bolsillo- sin control democrático, para sus cenas y «orgías».
Que lo paguen de su canuto.
Como contribuyente torrevejense, enterarte del coste de la «jamada», 3.000 euros (medio millón de las antiguas pesetas), para entregarle un «lápiz pelotero» al alcalde, sr. Dolón, es de vergüenza ajena; eso sí, siempre chupando de la teta del dinero público, que pagamos todos los contribuyentes. Estos/as de la foto -¡cómo les gusta salir en la foto, sobre todo a algunas luciendo pectorales, no veas!- son los que hacen de tapadera para justificar la desaparición de un derecho adquirido como era el transporte público escolar.
Que 300 personas se pongan «morás», celebrando un evento más, montado por la tela de araña y estómagos agradecidos, es de vergüenza.
Algún día no tardado, la ciudadanía despertará y se dará cuenta de lo que son estos artistas y otros, como el último Gobierno del Partido Popular, salido de las últimas elecciones, que lo primero que ha llevado a la práctica es subir los impuestos. Yo espero que despierte esta sociedad y vea dónde está la mentira y el engaño, y no les vuelva a apoyar.
Lo más curioso es que estos «chupópteros», son los que luego quieren recortar hasta los pañales, que, dentro de la Seguridad Social, los médicos recetan a las personas que lo necesitan. Lo dejo a su consideración. Eso sí, ellos siguen manteniendo sus coches oficiales, a cuenta del erario público. Tranquilos, que no lo pagan de su bolsillo, faltaría más. Sigue muy lentamente en los juzgados la investigación contra el sr. Hernández Mateo por su imputación. Según parece, hay chanchullos que, en algún caso, parece que le han reportado un beneficio de 5,2 millones de euros. Ahora se publica lo del «presunto corrupto».
Sr. Fabra de Castellón, que con el sr. Costa, el sr. Camps y todo un elenco de «presuntos», a ver si con el sr. Urdangarín les meten en el hotel de barrotes de una vez, pues yo entiendo, y los denuncio, que la corrupción hay que combatirla, es el cáncer de la democracia.
Eso sí, estos impresentables siempre votan a favor de que se hagan recortes en la Sanidad y la Educación pública. Nunca votan a favor de que se busque una solución para las personas que se quedan sin viviendas porque no pueden pagar la hipoteca porque se han quedado sin trabajo.
Posdata.- Ver a los concejales del primer partido de la oposición hacerse la foto en Fitur (Madrid), con el alcalde de Torrevieja, yo creo que es de una irresponsabilidad política de bulto. ¡Cómo les gusta salir en la foto! Más vale que se dieran una vuelta por Torrevieja. Por ejemplo, en la carretera de la costa hasta la Torre del Moro, donde a ambos lados de la carretera Alfredo Nobel, se te cae la cara de vergüenza, pues observas un paisaje deprimente y tercermundista, nada acorde con una ciudad turística, y no digamos nada de la situación del puerto pesquero y sus aledaños, donde la ruina y la suciedad es el pan nuestro de cada día.
Nota.- Hay que saludar con optimismo las concentraciones en la Plaza de la Constitución en contra de los recortes en la Educación Pública. Por algo se empieza.
La sentencia del juicio al sr. Camps y el sr. Costa, otro borrón para la Justicia española. De escándalo.
¿Hasta cuándo? Al tiempo.

Gerardo Garrido

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