Tengo 47 años y, por lo tanto, nací y viví unos años la Dictadura, celebré la Transición y la Democracia y, a pesar de todos los cambios que han sucedido en mi país, aún estamos muchos ciudadanos pendientes de uno muy importante: la democratización de los partidos políticos. El término «disciplina de voto» es algo más propio de una dictadura, en la que el líder, o un comité, «piensa» y habla por todos… Hay que recordar que a los políticos les votamos ciudadanos y estos se han de deber a sus votantes y no siempre a la voluntad de un líder o comité. No hay que confundir con el transfuguismo, que eso sí es demencial, pero cada político debe preservar su libertad de opinar en algun tema concreto y no ser un mero número para votar sin más. La Ley Electoral tiene que modificarse, ser ecuánime, y así podremos decir, realmente, que estamos en Democracia.
Guillermo Moya
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