Franz Kafka
El tema de la filosofía no sólo abarca el mundo del pensamiento en sí mismo, sino todo lo que nos haga reflexionar.
Por ejemplo, llevo ya varias semana observando minuciosamente el uso que hace Zuri, mi perra blanca, de los cinco sentidos, que son como las ventanas que comunican a los seres vivientes con su entorno, y he notado que no los utiliza de la misma manera que nosotros, los seres humanos. Para comenzar, su campo de visión resulta menos amplio que el nuestro, pues depende más directamente de la percepción de los sonidos, respondiendo más puntualmente a los ruidos de su alrededor. Lo que más les especifica a los canes como depredadores innatos es que se mueven maravillosamente en el ámbito del olfato, pues llegan incluso a localizarlo todo a través de la gama de los olores; en el caso de Zuri, cuando me acompaña en el asiento delantero del coche, se sirve de las corrientes del aire del ventilador para reavivar memorias o ampliar su mundo olfativo. Poco queda por añadir sobre sus gustos limitados de comida o sus preferencias por ser acariciada incesantemente.
Me sorprendió, al comentar el tema con uno de mis amigos británicos, que me subrayara el hecho de que los caninos gozaran más que los humanos del «Extrasense of Perception», pues son capaces de comunicar con el mundo de la percepción más allá aún de las impresiones que nos llegan a través de los cinco sentidos tradicionales.
HECHOS Y DICHOS
Todo el conocimiento con sus preguntas y respuestas se encuentran en el perro. Franz Kafka
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ladrando a la luna
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