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Escoltado por la Guardia Civil y provisto con una gorra y unas gafas de sol, acudió a declarar ayer sábado el pederasta condenado en Marruecos Daniel Galván en los juzgados de Torrevieja, donde defendió su inocencia. El detenido había sido llamado a declarar en relación a una denuncia por supuestos abusos sexuales a una menor en Torrevieja ocurridos en 2004, presentada por el padre de ésta. Durante algo más de una hora, Galván contestó a las preguntas formuladas tanto por fiscal como por la juez y su letrado, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV). A la salida de los juzgados, el abogado defensor, Manuel Maza, aseguró que el testimonio de la acusación presenta «contradicciones» y que la denuncia interpuesta podría responder a un «ajuste de cuentas» motivado por la negativa del acusado a pasar a cargo de su seguro un golpe que el padre de la menor habría sufrido con su vehículo. El letrado reconoció que su cliente mantuvo una relación de amistad con la familia y que la menor estuvo en varias ocasiones a solas en casa de Galván, aunque éste ha negado las acusaciones. Este lunes declarará la ex-pareja de Galván a petición de la acusación.
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