Estimados contribuyentes torrevejenses, digo los ladrones de guante blanco, todos a la cárcel, y me explico.
La última encuesta del CIS refleja las inquietudes de la ciudadanía española sobre los problemas que más nos afectan y la corrupción es el segundo problema, después del paro, según dicha encuesta.
El que escribe este artículo es una persona que viene denunciando -permanentemente- la corrupción en la sociedad española, por entender que es el cáncer de esta devaluada democracia en la que nos desenvolvemos. Quiero denunciar -en este escrito- uno de los atracos más escandalosos que se ha producido últimamente al Estado Español de dinero público, y que se ha minimizado en casi todos los medios de comunicación, o tapado, por todos estos mamporreros y pelotas, en las tertulias, en los medios de comunicación públicos. Se les tenía que caer la cara de vergüenza. Me refiero, en este caso, a la «subasta» que el BBVA «ha ganado» y se ha adjudicado el Catalunya Banc. Un titular: «El BBVA se hace con Catalunya Banc y el Estado tendrá que dar por perdidos 11.600 millones de euros de dinero público». Tela marinera. Para que estos ladrones de guante blanco se lleven esta barbaridad de dinero público, el gobierno del sr. Rajoy y compañía hacen mutis por el foro, y de esto no se habla.
Para estos atracos a las arcas públicas hay dinero. Para ayudar a todas las víctimas de esta crisis canalla que han creado los bancos, no hay dinero público. Qué sarcasmo. A ver si la ciudadanía toma cartas en el asunto, y en las próximas elecciones mandamos al paro a todos estos ladrones de guante blanco, no votándoles.
Pregunto: ¿Cuántos dramas personales o familiares se podrían haber solucionado con esos 11.600 millones de euros de parados, dependientes, hipotecados…? Pero no. Han ido a parar a los bolsillos de los banqueros, sus amigos, sr. Rajoy. Todos a la cárcel.
Siguiendo con los ladrones de guante blanco, la movida de la familia Pujol es de escándalo. Lo que más me molesta de esta gentuza es que, cuando están en el poder, dictan leyes que a los ciudadanos nos obligan a cumplir con mano de hierro, y ellos se las pasan -las leyes- por el arco del triunfo. Seguro que seguiremos con el tema. Todos a la cárcel.
Aquí en Torrevieja me quedo de un aire con que el PP, a través de sus cachorros de NNGG se dedique a quitar puestos de trabajo los fines de semana. No es de recibo. Estos «señoritos» de tela de araña tenían que presionar a su partido, el PP, para que obligue a la Empresa que explota las Salinas, a que limpie, adecente, y conserve-que es su obligación- durante todo el año, el canal del Acequión, que falta le hace. Aquí de propaganda barata y de la foto de rigor estamos hasta el moño.
A galopar…
¿Hasta cuándo? Al tiempo.
Gerardo Garrido
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