El presidente del comité de Acciona por la sección sindical de CCOO, Gaspar Cobos, ha zanjado la polémica que viene manteniendo desde hace dos semanas con la sección sindical de UGT, encabezada por Antonio Escamilla, a quien acusa de «mentir» con el propósito de «tapar el enchufismo» que solicitó a la dirección de la empresa para «colocar» a un familiar. Cobos pidió la dimisión de Escamilla, así como de los delegados de UGT Jesús Iglesias y Teresa López, quienes firmaron el último escrito de acusaciones. En cuanto al incumplimiento del reglamento, Cobos aclaró que la convocatoria de reuniones debe ser «bilateral», hecho que «no ha sido así», ya que las convocatorias «han sido promovidas exclusivamente por CCOO». Además, explicó que el ex-delegado de UGT, Pedro Villa, trabajó durante los últimos años «estrechamente» con CCOO y cuando intentó «poner orden» en UGT «empezaron los problemas» y «se dio de baja» para «darse de alta en CCOO», hecho que «ha empeorado la relación». Cobos negó que este verano hayan contratado a «familiares directos» suyos, indicando que su hijo lleva cinco años fijo. Por último, Cobos defendió la labor de CCOO velando por los derechos de los trabajadores, señalando que «llevamos 23 años liderando el comité de empresa y los hechos hablan por sí solos».
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