El AMPA del CEIP Inmaculada ha mostrado su disconformidad con la vuelta a las ratios de 25 a 30 niños por aula, según afirma, «no sólo por motivos sanitarios sino también pedagógicos». Así lo expresó en el último consejo escolar del curso pasado, cuando recibió la información del nuevo protocolo para el curso 2021/2022, que establecía que al volver a las ratios habituales debían dejar el aulario junto al Auditorio de Torrevieja. El AMPA, que trasladó su preocupación a inspección, considera que «sería deseable mantener las ratios bajas», ya que en muchos centros «acaban rozando el número máximo de 30 niños» a pesar de que la ratio media de la Comunidad Valenciana es de 22,5.
Con Franco éramos 50 en el aula, al profesor se le veneraba y respetaba, y salíamos de la escuela nacional catedráticos, oiga. Y pobre de tí si el maestro se quejaba a tu padre (de ahí viene lo del pulpo). Se sabía que para ser algo en la vida había que esforzarse. Cosas tan complicadas de entender como que para aprender hay que estudiar y para promocionar hay que aprobar, las llevábamos impresas: los buenos en la mente y los menos buenos en las costillas. Y no pasaba nada: niños capaces y felices. Ahora, si logran nacer, son torpes, blandurris y acomplejados: combinación letal para el hombre y la sociedad, pero muy lucrativa electoralemnte para la izquierda más astrosa.