Morir en la carretera

Mientras lea usted estas letras, un grupo de socialistas y comunistas de Valencia cuyos sueldos públicos se sufragan con nuestros impuestos estarán diseñando la estrategia propagandística necesaria para hacernos ver que las empresas privadas en general son malas y las que se dedican al sector sanitario son el demonio emplumado. Esas personas lideradas por el presidente socialista de la Generalitat, Ximo Puig, saben conscientemente que están hundiendo la asistencia sanitaria a los que vivimos en el Sur de Alicante, al tomar la mortal decisión contra toda lógica de expulsar a «Ribera Salud» como gestor sanitario del Departamento de Salud 22, que engloba a 10 municipios de la Vega Baja, y al mejor Hospital de toda la Comunidad Valenciana, que es el situado en Torrevieja; a tres kilómetros de Orihuela-Costa; a poco más de diez kilómetros de Guardamar, San Miguel de Salinas, Rojales, Benijofar, y Los Montesinos. Y, como saben que van a reventar la Sanidad Pública aquí con su aberrante decisión, como no tienen ni médicos ni sanitarios que quieran trabajar con la Conselleria de Sanidad, nos van a vender como mercancía averiada de quinta mano que todo lo malo aquí es culpa de los americanos de «Ribera Salud». En otras palabras: nos toman como imbéciles mientras con nuestro esfuerzo y sacrificio personal por la vía del abono de los impuestos además les vamos a pagar el sueldo a los políticos socialistas que nos van a recortar servicios sanitarios. Conviene recordar que la Sanidad Pública es competencia del Gobierno valenciano, para lo bueno y para lo malo. Conviene recordar que la Sanidad Pública en Torrevieja y en toda la Vega Baja siempre ha sido gratuita y universal. Conviene recordar que desde mayo del año 2015 (más de seis años) los socialistas ya anunciaban que el 15 de octubre de 2021 asumirían la gestión directa de la Sanidad Pública en el Departamento 22 de Torrevieja Y NO TIENEN PLAN. Y conviene recordar que las excusas que ya están fabricando los socialistas para achacarle al «diablo americano Yankee de Ribera Salud» los males de todo el mundo mundial no cuelan. Quince años no han sido suficientes para que los que aquí vivimos olvidemos el dolor de corazón que nos suponía la duda de cuántas personas enfermas no hubieran muerto en camino buscando un Hospital. Destruyendo al Hospital de Torrevieja, Ximo Puig nos condena a morir en la carretera.

16 comentarios

  1. «En otras palabras: nos toman como imbéciles mientras con nuestro esfuerzo y sacrificio personal por la vía del abono de los impuestos además les vamos a pagar el sueldo a los políticos socialistas que nos van a recortar servicios sanitarios».

    Te prevengo que va a salir Torrado a preguntarte si has devuelto no sé qué importe de no sé qué asunto de no sé qué año; que ese dinero procedía «del abono de los impuestos». Escribe un día del asunto que ya estoy harto de Torrado, el temita y su tonito.

  2. Doña madrileña, no se apure: ése es un muy enemigo mío que me persigue y trata de desfacer y desacreditar todas mis gestas con el falso seudónimo de Torrin; pero descuide, no es el verdadero, sino uno que quiere parecérsele, (lo que a todas luces se ve) sin conseguirlo.
    Mi incondicional admiración y respeto hacia su augusta persona.

  3. .- El segundo comentario, no es mío.
    .- Alguien no ha devuelto todavía 184.000 €, cobrados indebidamente, según sentencia judicial. Ya que hay quien no quiere saber del tema.
    .- Y sobre morir en la carretera, le debemos al PP local y en particular al exalcalde-delincuente, el no desdoblamiento de la N-332 a su paso por Torrevieja, y a la empresa privada Ribera Salud, el no desdoblamiento del tramo de vía, desde el Hospital a La Veleta, que debería haberlo ejecutado, al quedarse con la concesión y negocio de salud de la zona de Vega Baja Costa durante quince años. Esto se lo puedo recordar a la plataforma Sanidad Excelente y en particular a su representante una tal Mamen.

  4. Doña madrileña: ya salió el verdadero. Son los dos de parecida condición izquierdista, pero aquél más zafio.
    La voy a regalar con una frase que no es mía, pero que dado su ingenio y verdad merecería ser esculpida en piedra: Cuando la izquierda pierde unas elecciones, intenta destruir España; cuando las gana, lo consigue.

    A sus pies, mi querida Señora.

  5. Suplantador, no te molestes en incordiar, mi muy estimado Sr. No y la que suscribe, sabemos perfectamente que comentarios no haríamos nunca.

  6. Discúlpelo, Señora mía: Todo se resume en que el pobrecito es rojo y está poco escolarizado; pasó de curso con suspensos.

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


*